Regina Blandón, Mariana Treviño y Mario Iván Martínez fueron niños que el Día de Reyes estaban emocionados porque seguramente algo descubrirían en su zapato, aunque no necesariamente un pony o un reno, como a veces solicitaron.
Claro que también sufrieron desilusiones, pero siempre con rosca a la mano y la duda de quién de la familia sacaría el muñeco.
Ahora los tres se encuentran en vísperas de estrenar el filme de animación La liga de los 5, hecho que ocurrirá el próximo día 10. Regina presta su voz a una joven que tiene la habilidad de revivir a los muertos y Mariana es la Catrina quien, con su esqueleto, puede convertirse en lo que quiera. Mario Iván, en tanto, es el villano vampiro.
La historia de la película se desarrolla en la Ciudad de México, teniendo como contexto barrios identificables como Coyoacán.
Antes del lanzamiento de Ánima Estudios, los actores platican con EL UNIVERSAL sobre sus vivencias el 6 de enero, del cual conservan algunos juguetes.
Regina Blandón: Mi familia siempre ha sido de festejar las fiestas navideñas y demás; era el día de esperar regalos y partir la rosca para ver y descubrir el muñeco.
Mariana Treviño: En mi casa se celebraba, pero no tanto. Nos ponían en los zapatos algún detallito, porque los juguetes eran a Santaclós, quizá por la cercanía de Monterrey con EU. ¡Y comer rosca!
Mario Iván Martínez: Mi madre (la actriz Margarita Isabel) tuvo mucho cuidado de platicarnos la historia y nos decía que realmente no sabemos si fueron tres los Reyes, jamás se mencionan los nombres, otros dicen que eran 12 por las tribus de Israel. Sólo se sabe que eran tres regalos: mirra, oro e incienso. Siempre nos completaba el mito y con una referencia de historia.
RB: ¡Esa es fácil! ¡Yo quería un pony! (risas). No había dónde ponerlo, yo quería que fuéramos una familia ecuestre.
MT: ¡No me acuerdo! Sólo recuerdo de la emoción de despertarme en Navidad e ir con la emoción de ver qué había llegado.
MIM: Casi siempre me trajeron lo que pedí (risas). Pero recuerdo que a Santaclós le decía: tienes muchos renos, ¿qué te cuesta darme un renito, uno de sus hijos? Le pedía me mandara un trineo chiquito para así irme volando a casa de mis amigos. Una cosa que extraño es la rosca con un niño de porcelana, mi abuela decía que era el niño Dios y era único. Ahora meten seis y lo entiendo, ¡porque con la carestía hay que cooperar para los tamales! (risas)
RB: Un día nos regalaron a Memela, que era un perrito pug y estuvimos con ella 14 años. Prácticamente estuvo conmigo en niñez y adolescencia, hasta que entré a la Universidad. Ahora tenemos otro pug, tenemos obsesión con eso (risas).
MT: En mi casa de Monterrey todavía tengo regalos como la Casita del Árbol, verdecita, que se abría y alrededor del tronco estaban los cuartos (risas). Fue el juguete que más me impactó, recuerdo estar viendo cuarto por cuarto y descubrir detallitos, ¡era una fascinación!
MIM: Puede ser que por ahí ande un tren, siempre pedía una maquinita. Recuerdo que una vez cayó en domingo el Día de Reyes y necesitaba pilas para una máquina, mi papá me dijo que todo estaba cerrado y yo le respondí que sabía que había una farmacia abierta, así que me dejó ir solo, (tenía como seis años), pero no encontré nada. Estaba en la calle llorando y llega un chavito, que supongo era un adolescente gañán, preguntándome qué tenía. Le respondí lo que pasaba y dijo que su papá hacía pilas, que le prestara la maquinita y luego me la traía. ¡Aún sigo esperando que llegue!
En La liga de los 5, Mario Iván utilizó palabras en alemán y eslavo para darle voz al vampiro mientras lanza hechizos.
“Yo digo kartoffelpüree cuando hace algo, suena bien, ¡pero en realidad eso quiere decir puré de papa en alemán!”, revela.
La producción de la nueva cinta de Ánima Estudios, empresa atrás de la saga de leyendas, arrancó hace casi un sexenio, teniendo como otros personajes a un luchador que espina, un chico que enchila a su paso y un guerrero azteca que se transforma en animales.
“Queríamos ver la idiosincrasia de superhéroes mexicanos con poderes no impresionantes pero que, a pesar de ello, logran hacer bien su chamba”, dice Marvick Núñez, director del filme.
“El vampiro es alguien extranjero, viene del inframundo y por eso hay una batalla en el Castillo de Chapultepec, porque queríamos luchar contra el invasor de afuera, defender lo nuestro”, agrega