Hollywood.— Son ya 359 millones de dólares que Wicked: parte I tiene de venta de boletos en su caldero a nivel mundial, volviéndola de esta manera en una de las más exitosas de 2024.
Tan sólo en Estados Unidos, la cinta con Ariana Grande y Cynthia Erivo lleva 262 millones, conviertiéndola en la cinta más vista en este país basada en un musical de Broadway. El récord lo tenía Vaselina (1978) de John Travolta y Olivia Newton-John con 190 millones de dólares.
En México acumula 2 millones de dólares (100 millones de pesos) en taquilla.
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“Es una sensación extraordinariamente surrealista. Estoy muy agradecida y tengo el recuerdo hermoso de mi visita a la premiere de México en que nos recibieron con mucho amor. Cynthia y yo no hemos dejado de mandarnos mensajes de texto compartiendo nuestra emoción. ¡Nos sentimos flotando!”, expresa a EL UNIVERSAL Ariana Grande vía zoom, acompañada de Erivo y el director Jon M. Chu.
En Wicked: parte I, basada en el musical de Stephen Schwartz y Winnie Holzman, con su libreto y canciones inspiradas en el libro de Gregory Maguire, Ariana Grande interpreta a Glinda, la buena bruja del Sur del mundo de Oz, quien cuenta su amistad en la escuela de hechicería con Elphaba (Cynthia Erivo), futura bruja mala del oeste.
Esta es la historia alterna de los personajes creados por L. Frank Baum en su libro El Mago de Oz en 1900, y llevada al cine con Judy Garland en 1939.
“Quise ser lo más honesta con mi personaje Glinda. Hice mucha lectura entre líneas del libreto y escarbé cuanto pude en su psicología. La intención es que mi actuación en su superficie revelara sus miedos e inseguridades.
“En cuanto al buen humor que siempre trae Glinda, me recordé que las bromas estaban ahí en la página, por lo que actuar con honestidad era lo importante para que funcionara”, explica Ariana, de 31 años, vendedora de más de 90 millones de discos como cantante y famosa por su registro y voz de silbido.
Jon M. Chu, director de Wicked: Parte I, dice sentirse más que orgulloso por Grande y Erivo, pues reconoce que que desde el rodaje tomaron muchos riesgos y se atrevieron a ser vulnerables como artistas.
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“Con Ariana además de su sentido del humor y bailes, hay que prestar atención a sus silencios. Revela mucho del interior de Glinda. Con Cynthia su magia es que canta letras que has escuchado cientos de veces y parece que las oyes por primera vez”.
Erivo, de 37 años, es defensora de los derechos de la comunidad LGBTQ+, también se dice satisfecha. “Yo soy uno de estos chicos a los que les gusta cantar en las salas de cine.
“Me conmueve se conecten con Elphaba. Un amigo me escribió que por primera vez se identificaba con alguien en la pantalla; yo encuentro muchas similitudes con mi personaje, con todas estas sensaciones de sentirte que no encajas en ningún lado o que el mundo te hace a un lado. Todo esto ha sido muy hermoso”.
Ante la pregunta sobre qué esperar para Wicked: parte II, que se estrenará en diciembre de 2025, los tres artistas tras el telón del universo de Oz coinciden en que no quieren revelar secretos.
“Vamos a ver lo complicado de luchar por un hogar, citando la famosa frase ‘no hay un lugar como el hogar’ y preguntando ¿cuál es el valor de un hogar cuando nadie te ve o reconoce? También sabremos qué le pasará al Mago de Oz. Todo mundo crecerá en la nueva película. No puedo esperar que la gente la experimente”, adelanta Cho, quien actualmente se encuentra editando Wicked: Parte II, pues se filmó en conjunto con la cinta ahora en cartelera.
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