El teatro guardó silencio. La obra "Felices", con Eduardo España y que se presenta los lunes en el Teatro Julio Prieto, decidió parar función ayer, por tener a mujeres en su equipo de trabajo.
El actor que interpreta a Germán en la serie "Vecinos" comentó que el apoyo a las mujeres era necesario
“¡Son seres maravillosos que merecen nuestro respeto!”, respondió el histrión a pregunta expresa.
Otros foros que se sumaron al paro fueron el Lucerna, donde se presenta A fuego lento, estrenada apenas la semana pasada; el Ofelia, con La historia de gazapo, monólogo de Francisco Suárez, y el Nuevo Teatro Libanés, en el cual los lunes se presenta Vincent, girasoles contra el mundo, protagonizada por Mario Iván Martínez.
En el Wilberto Cantón, donde se monta "Teatrospectiva musical, la oficina", en la cual una mujer es la encargada, sí trabajó.
La responsable que vigila dar información a quien lo requiera, dijo haber llegado desde temprano, porque las llamadas telefónicas nunca se detienen.
“Y hay pendientes que afectarían al resto de la semana”, recalcó.
Su labor terminó alrededor de las 15:00 horas, la mitad de su jornada normal diaria.
En la taquilla de un teatro por la zona de Chapultepec, llegó Jael desde las 10:00 horas.
Con cinco años de experiencia decidió asistir pues al ser freelance, cobra conforme a días trabajados.
“Sí nos avisaron que podíamos faltar, pero aquí mientras más trabajas, más ganas, y pues el dinero se necesita. No podemos darnos ese lujo”, apuntó la chica.
Ocesa Teatro, una de las más grande productoras escénicas, contrató por un día a dos hombres para hacerse cargo de la venta de boletos en el Centro Cultural San Ángel y el Centro Teatral Manolo Fábregas y poder así dar el día a las mujeres que laboran normalmente.
En el Sistema de Teatro de la Ciudad de México y el Centro Cultural Helénico, cerca de 50 mujeres se sumaron a la iniciativa de Un día sin nosotras, con la que se pidió no asistir al trabajo y escuelas.
