El conocido actor Richard Gere y el ministro de Interior de Italia, Matteo Salvini, cruzaron este sábado palabras y críticas en un inusual rifirrafe.
Nada tuvo que ver con alguna película de Hollywood o con la crisis que atraviesa el gobierno italiano que podría llevar a elecciones anticipadas.
El motivo, en realidad, se encontraba navegando a cientos de millas de las costas de Italia.
El barco Open Arms, de la ONG homónima española, se encuentra a la deriva desde hace más de una semana cerca de la isla italiana de Lampedusa con 160 migrantes a bordo, que esperan a que algún país europeo les autorice un puerto.
El coprotagonista de Pretty Woman, devenido activista, visitó de forma sorpresiva la embarcación el pasado viernes para llevar provisiones, como una forma de llamar la atención mundial sobre la situación de las personas que intentan cruzar el Mediterráneo desde África.
Y, como parte de su campaña, dirigió varios mensajes al gobierno italiano, que ha tenido en Salvini uno de los más renuentes oponentes a la entrada de refugiados en la Unión Europea.
Durante una conferencia de prensa este sábado, Gere pidió a Roma que ayudara a los tripulantes del Open Arms para que pudieran entrar a alguno de sus puertos, a la vez que consideró que las autoridades italianas deberían dejar de "demonizar a la gente".
El actor cuestionó las leyes antiinmigración del ministro italiano, que impone multas a las organizaciones de derechos humanos que salven migrantes en el Mediterráneo.
"Nadie me dijo que viniera. Vine de forma espontánea. Estaba pasando las vacaciones con mi familia cerca de Roma y después de que se aprobara la ley antiinmigración, una ley que nadie se podía creer, decidí visitar el barco de la organización Open Arms, que conocí hace unos años en Barcelona", dijo.
Además pidió a acoger a los refugiados que llegan a Europa que, en su criterio, acumulan "historias de mucho sufrimiento".
El ganador de un Globo de Oro por su actuación en Chicago comparó la actuación de Salvini, que ha realizado repetidos esfuerzos para bloquear el atraque de barcos con migrantes en Italia, con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
"(En EE.UU.) tenemos nuestros problemas con los refugiados que vienen de Honduras, El Salvador, Nicaragua, México... Es muy similar a lo que están pasando aquí", dijo.
Lo que casi nadie se esperaba era que del otro lado, obtendría una respuesta.
La respuesta del también viceprimer ministro de Italia no se hizo esperar.
Salvini llamó a Gere "generoso millonario" y le dijo que se llevara los 160 inmigrantes a Hollywood en su avión privado.
"El generoso millonario anuncia su preocupación por los inmigrantes del Open Arms, se lo agradecemos: que lleve a Hollywood, en su avión privado, a todas las personas a bordo para meterlas en sus mansiones", dijo.
El ministro del Interior consideró las solicitudes de desembarcar del Opens Arms como una "provocación" que ignora la vida de los migrantes.
Según Salvini, debería ser España, el país donde está registrado el barco, la que acoja a los migrantes, algo a lo que Madrid se negó.
El político de extrema derecha amenazó además con capturar la embarcación, a raíz de poderes especiales que le entregó el parlamento recientemente.
"Seguramente, (Gere) está impresionado por las decisiones que se han tomado para reforzar a la policía y contrarrestar a los contrabandistas y criminales. Italia había estado esperando esas medidas durante años", afirmó.
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