El año 2020 nubló el mundo de Itatí Cantoral. La actriz sufrió lo que millones de personas han padecido desde el inicio de la pandemia: perdió a un ser querido, su madre, Itatí Zucchi, por complicaciones de Covid-19.
Es un dolor que no se irá, pero aceptar nuevos retos ayuda a vislumbrar un panorama, como le ocurrió con el protagónico de Sola en la oscuridad.
“Le agradezco a Morris Gilbert —productor de la obra— porque me ha regresado el alma al cuerpo. Después de haber despedido a mi madre, es lo mejor que me ha pasado, porque el escenario te sana, te salva, te reconforta, te inspira para seguir adelante y decir: ‘gracias a Dios que estoy viva”’, dice.
Fue el 17 de julio pasado cuando su hija María Itatí recibió su Primera Comunión y el productor llegó a la fiesta con el libreto de Wait until dark, de Frederick Knott, y que en 1967 protagonizó Audrey Hepburn en cine. Itatí estrenará mañana en el Teatro México.
Sola en la oscuridad cuenta la historia de Susy Hendrix, una ama de casa ciega que resulta asediada por tres delincuentes que buscan la heroína escondida en una muñeca que el marido de Susy, Sam, había transportado inocentemente desde Canadá.
Desde que Itatí protagonizó Misery en 2011, no había vuelto a abordar una historia de suspenso en teatro, pero se dice confiada de hacerlo ahora, porque va de la mano del director Enrique Singer, a quien considera un maestro.
“Estoy aprendiendo y trabajando bastante para hacerlo lo mejor posible. Es una obra muy ágil, te provoca muchos nervios, además estoy con los mejores creativos de México, se invierte mucho tiempo pero se ama lo que se hace”, resalta.
Itatí admite que ha aprendido a respetar a las personas que viven con la condición de su personaje, quien queda ciego porque descubre que serlo es percibir con todo el cuerpo, agudizar los otros sentidos.
"Después de despedir a mi madre, pienso que (la obra) es lo mejor que me ha pasado, porque creo que el escenario te sana, te salva”. Itatí Cantoral. Actriz
Entre ídolos
Aunque haberse metido tanto en el papel le provocó a la actriz miedo de quedarse sin vista (ya que cuenta, usualmente trabaja con poca luz), agradece sentirse arropada por sus compañeros Luis Gatica, Marco de la O, Lenny Zundel, Marcial Casale y Sergio Bonilla.
“Son seres a los que admiro muchísimo, que están al 100% en el escenario; qué más apoyo que eso, no siempre estás en una compañía en la que todos somos amigos”.
2 películas tiene la obra de Frederick Knott, de 1967 y 1982.
Con 35 años de trayectoria, a Itatí no le cuesta reconocer el talento y la admiración que siente por figuras más jóvenes como María Perroni y Nina Rubín, con quienes comparte el escenario en esta obra.
“Ellas están espectacularmente bien desde la primera lectura. La capacidad que tienen las dos niñas es enorme, yo tengo una hija de esa edad y ella no la tiene. Qué bendición tenerlas al lado porque ellas me enseñan a mí, me han hecho regresar al texto y pensar que lo tengo que decir de otra manera, son muy inteligentes, tenemos a una Ofelia Guilmáin y a una Marga López, van a tener una carrera importante”, vaticina.
Itatí donará lo de una función a una institución que enseña a personas ciegas a leer y andar por las calles, etcétera.
20 obras de teatro ha realizado Itatí Cantoral en sus 35 años de carrera.
Y es que el altruismo es algo que la tiene ocupada últimamente. Entre esas causas está Moda con propósito, con la que apoya a mujeres que han sufrido violencia de género y el 19 de diciembre realizará una visita a niños y niñas de bajos recursos, con donaciones de Distroller.
Gracias a todo esto, Itatí siente que hoy está más fuerte que nunca, a pesar de que esta pandemia la puso ante una de las pruebas más duras.
“Yo perdí a mi madre y con eso lo digo todo, pero creo que todos lo que somos sobrevivientes es porque teníamos que estar aquí, echarle más ganas, y quiero compartir con la gente lo que me gusta hacer”.
El filme
Protagonizada por Audrey Hepburn, Wait until dark, se estrenó en 1967.
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