Podría decirse que cualquier parecido con la realidad es mera casualidad; en esta historia hay un empresario de dudosa reputación, un político que aparenta cambiar, un joven deportado y una mujer que empezó desde abajo para tener un salón de belleza, sin embargo no está basada en personajes reales.
La realizadora Guita Schyfter tomó la novela "El águila y el gusano", de Hugo Hiriart, para hacer su versión cinematográfica, que llega hoy a salas comerciales.
En el texto original, editado en 2014, coloca a diversos personajes de la sociedad mexicana en una aventura surgida por el descubrimiento de algo valioso.
Dolores Heredia, Angélica Aragón, Roberto Duarte, Ernesto Laguardia y Marcelo Alonso integran el reparto de este filme que hoy se estrena en cines mexicanos.
“Quería hacer una serie para televisión y tomar un curso sobre eso, pero el único que quedaba abierto en Los Ángeles era de comedia; me dijeron que era lo más difícil, y lo tomé. La frase que el maestro nos decía y que se me quedó es que la comedia era el arte de estar enojado”, cuenta Guita.
Agrega que además acababa de salir el libro de Hiriart y dijo: creo que puede adaptarse.
Hay varias escenas con las que la gente podrá no emitir carcajadas, pero sí tendrá una amplia risa interior. Como cuando un personaje le pregunta a otro qué ve en un espejo: “Pues yo”, responde; “no, es la vida que pasa”, así es reprendido.
“El cine que se está haciendo ahora en México habla de pobreza, abuso, inmigración, corrupción, y todas esas son historias que hay que contar, por supuesto; son las que gustan en los festivales internacionales; la historia que cuenta Hugo es la misma, pero de otra manera, mucho más estilizada. La ley de Herodes, de Luis Estrada, es fantástica, es una farsa, yo lo que hago es una sátira”, apunta.
El camino de "El águila y el gusano" no fue fácil, porque fue de las cintas afectadas por la llegada de la pandemia de Covid-19 en 2020 que prácticamente paró a la industria audiovisual de todo el orbe.
“Su arranque fue atropellado, primero no salía el dinero, y los actores se iban y había que cambiar. En marzo (de hace cuatros años), cuando teníamos una semana de prerrodaje, todo se pospuso”, recuerda la directora, quien retomó los trabajos dos años más tarde.
La cinta fue filmada en la Ciudad de México y la selva lacandona de Chiapas. Llega tras haber obtenido nominación al Ariel 2024 para Guion adaptado y de tener presentaciones en festivales de cine como Rotterdam y Morelia.