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araceli.garciam@clabsa.com.mx
Las experiencias de la vida han llevado a Edith Márquez al lugar en el que está hoy como persona y musicalmente. La cantante ha aprendido a vivir en el aquí y el ahora porque, comenta, es lo único que tenemos.
“Algo que nutre mucho es la soledad, encontrarte contigo mismo y decir: ‘me siento tan a gusto así, tan plena, y no necesito a nadie a mi lado’. Y hablo de nadie porque nosotros los seres humanos somos muy dados a decir: ‘es que yo sin... me muero’. Y no, la verdad es que la vida sigue, la vida continúa”, comparte.
“Parte del crecimiento es darte cuenta y estar en plena consciencia de lo que yo he hecho con mi vida, todos los logros que he tenido, las caídas, cómo me he levantado. Eso es lo que más te nutre y te hace evolucionar como persona”.
Esa Edith es la que el próximo 18 de mayo llegará a la Arena Ciudad de México con su Contigo Tour, nombre que surge de su último disco y del que se desprende el sencillo “Tú me obligaste”. En el video promocional se ve a una Edith fuerte, decidida a vengarse del hombre que la engañó.
“A estas alturas de la vida una mujer lastimada, herida es muy peligrosa. Cuando estamos enamoradas damos todo porque piensas que realmente no hay un engaño, una traición, y cuando te das cuenta que sí, se te puede caer todo tu mundo en mil pedazos”.
Contrario a esa historia, Edith comparte que no se identifica tanto con el tema de la canción.
“A nivel personal no he hecho algo así, no sé si me atrevería. A lo mejor hay mujeres que son más fuertes o están más preparadas para ciertas cosas, vivirlas y llevarlas a cabo”.
Edith está a favor del empoderamiento y de que las mujeres se levanten más fuertes después de una caída. Sin embargo en cuanto a movimientos como el #MeToo tiene algunas reticencias.
“Me parecen bien siempre y cuando estén sustentadas y digas: ‘a mí me pasó tal día, así con esta denuncia tal cosa’. Desde el año pasado se empezó a dar una ola de un director me parece de cine y entonces como una, todo el mundo dijo: ‘a mí también, a mí también‘’, no, ’. ¡No! Tampoco se trata de ensuciar el nombre de la gente nada más porque sí.
“No dudo de que pudiera haber algo pero yo sí creo que debería de existir siempre la confrontación y poder comprobar que lo que esa persona está diciendo es real”.
