Ni con el “Chiquitibum a la bim bom ba, chiquitibum a la bim bom ba”, que entonó un grupo de afuera del hotel Four Seasons, ni con el tradicional "Cielito Lindo" salió la cantante para saludar a los fans que estaban esperándola.

La llegada de la británica a la Ciudad de México movilizó a todos sus seguidores y aprovecharon cada minuto de su estancia en tierras aztecas para intentar verla en persona, saludarla o conseguir la tan anhelada selfie.

Sólo algunos fueron los afortunados que consiguieron un recuerdo de la intérprete de cuando ayer visitó una tienda de ropa, pero muchos se quedaron con las ganas.

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Quienes menos suerte tuvieron fueron los jóvenes que decidieron ir al complejo hotelero en el que se hospedaba, ya que, a pesar de las horas que pasaron afuera del lugar, la cantante decidió no salir ni asomarse por alguna de las ventanas, como lo han hecho otros artistas.

Cuando la compositora londinense llegaba al hotel su vehículo descendía por el sótano para que no fuera vista por los fans.

“Los del lado izquierdo gritan ‘Dua’ y los del derecho ‘México’, uno dos tres ‘Dua México, Dua México, Dua México”, gritaron algunos adolescentes aunque ni así obtuvieron señales de ella.

Aún así, el mariachi, integrado por cuatro músicos, siguió cantando varios temas, hasta que el dinero que lograron juntar sus fans terminó por agotarse.

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