Dos hermanos mellizos que, junto con su hermana pequeña y su madre, viven en una isla lejos de toda civilización. Ambos están en la adolescencia y la relación fraternal es muy fuerte, quizá demasiado para lo que se consideraría normal.
Así inicia “La piel pulpo”, filme de la ecuatoriana Ana Cristina Barragán, que estrenó este jueves en salas comerciales y que en su momento compitió en el festival de cine de San Sebastián y por los premios Platino a lo mejor del cine iberoamericano.
“Quería hacer una película en una playa en la que paseo muchos años de mi infancia y, pensando en la luz de la misma, lo relacioné con el universo de las relaciones fraternales fuertes. En mi primera película ya había explorado la relación padre-hija, madre-hija, ahora me interesaba este mundo secreto de heridas de la infancia, la animalidad, el aislamiento”, comparte la realizadora con EL UNIVERSAL.
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La cinta cambia de ritmo cuando la hermana mayor decide ir la ciudad. Y las cosas pasan de lo apacible a todo una fiesta de colores y sonidos, incluyendo canciones de Jeanette, conocida por la canción “Por qué te vas”.
“Se creó un universo (para la playa) con sus propias reglas y la ciudad lo que hace es que abre un poco el mundo y genera cierta libertad. Estuvimos varios meses ensayando y trabajando el vínculo, con sus cuerpos buscando esa animalidad y se hicieron hermanos como de verdad”, apunta.
“La piel del pulpo” no se rodó en una isla como marca la película, sino en playas diversas y un manglar, teniendo también la fortuna de la naturaleza.
“Fuimos a un sitio donde había restos de pescados que tiran los pescadores y la aves comenzaron a llegar, fue un momento muy potente, no sabíamos que iba a haber tantas cosas”, recuerda Barragán.
La realizadora, de 37 años, acaba de concluir su nuevo trabajo fílmico llevando a la actriz mexicana Simone Bucio (“La región salvaje”) en el protagónico, junto con el joven Francis Edu Llumiquinga Ramos
“Es sobre dos personajes que son extraños y llega un lazo familiar entre ellos a pesar de que no se conocen, no son familia sanguínea, pero de alguna forma están marcados por las mismas heridas. Ella es una mujer de 30 años y él, un adolescente”, expresa.
Se espera que esté lista para 2025 y haga recorrido festivalero.
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