En una época donde la tipica historia de la Cenicienta yo no basta para el espectador, la productora Giselle González considera que valió la pena tomar el riesgo de llegar a la televisión abierta con un producto como "Imperio de mentiras", que llegará a su final este domingo.
“Esta es una gran oportunidad de contar historias diferentes, porque tenemos un canal que permite eso, donde hay variedad y para todos los gustos.
“Creo que este tipo de contenido atrajo principalmente a un público que buscaba otra opción en otras plataformas, y encontraron algo en "Imperio de mentiras" que fue de su agrado, así que en conclusión creo que la diversidad hace crecer, si ofreces siempre lo mismo, llegará un punto en que la gente quiera ver cosas distintas”.
Así que la productora asegura que fue un gran atino combinar el melodrama con el thriller, porque la gente se topó con la historia de amor pero también con un misterio por resolver y por lo tanto con el suspenso, dando siempre un giro sorpresivo a la trama, lo que considera mantuvo al público atento desde el principio.
Esta tónica es la que quiso seguir hasta el final de esta historia, por lo que decidió realizar cuatro finales para que así el televidente esté atento durante toda la transmisión, además de que evitará de esta manera cualquier filtración del desenlance antes del domingo, en la emisión de dos horas.
86 EPISODIOS tuvo la historia que es una adaptacion del teledrama turco “Amor y dinero sucio”
El éxito de este drama en gran medida se lo atribuye al elenco que lo conformó, comenzando por Angelique Boyer y Andrés Palacios, quienes estuvieron apoyados por primeras figuras como Alejandro Camacho, Leticia Calderón, Patricia Reyes Spíndola o Verónica Langer.
“Para mí este elenco fue de los mejores, yo no sé qué hubiera pasado si otros actores hubieran interpretado estos personajes, porque yo me quedé maravillada porque el guión lo superaron por mucho estos actores con su interpretación”.
Giselle explica que dentro de la producción se formó un equipo muy unido, porque todos querían llevar a buen puerto esta telenovela y para lograrlo tenían que cuidarse unos a los otros, algo en que todos se comprometieron.
“Es un proyecto que me deja mucho aprendizaje, es una nueva manera de producir y hacer televisión, incluso también de vivir. Cuando comenzó esta pandemia tuvimos que cambiar el sistema de trabajo, trabajar mucho en casa para llegar con más certeza al set, con decisiones ya tomadas y no perder tanto tiempo”.
Aún así enfrentaron dos contagios dentro del elenco, Michelle González y Andrés Palacios, pero gracias a que tenían grabaciones adelantadas, gracias a los cambios que hicieron en su método de trabajo, ellos pudieron recuperarse con tranquilidad y es por eso que la productora agradece el gran trabajo que hizo su equipo.
Para sus siguientes telenovelas Giselle González planea seguir por la misma línea que "Imperio de mentiras", es decir, historias apegadas a la realidad, que no sean lineales y que ofrezcan distintos géneros dentro de la trama.
“Esto se vive diferente hasta dentro de la grabación, porque es un reto de interpretación, de dirección, porque debes tener bien claros los elementos para saber hacia dónde se lleva a los personajes, porque si no vas engranando bien la historia, al final termina siendo algo que no tiene fundamento”.