En un segundo día que estuvo dominado por mujeres que propusieron ritmos agresivos como hard techno, como la rusa Nina Kraviz, o la Estadounidense Sara Landry, el dance electrónico David Guetta fungió como un bálsamo para miles de asistentes del EDC.
Con múltiples guiños a la música latina, como a canciones como “danza kuduro” de Don Omar, y hasta algunos sonidos que recuerdan a canciones de Bad Bunny con un saco en color rojo David Guetta salió a disfrutar junto a los mexicanos.
Pero además de experimentar con sonidos conocidos para el público de la capital, los máximos éxitos del parisino como “I am Good”, “When we were Young”, o “When love takes over”, fueron las que hicieron disfrutar más a los asistentes.
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A las orillas de dónde miles de personas todavía tenían energía para seguir bailando después de la 1 am muchos también decidieron disfrutar del pionero del dance sentados a los costados del escenario.
Muchos cenando, otros todavía tomando algo, alrededor de ellos los vendedores cerraban ya sus localidades de comida o de cerveza, pero siempre acompañados por el público que todavía quería seguir la fiesta gritando “¡Eh, eh eh”, a los trabajadores que terminaban su jornada.
Estos ya relajados responden levantando las charolas de cerveza, bailando y entretenían al público fiel a David que no pensaba perder la oportunidad de verlo una vez más en México.
El francés se limitó a concentrarse en su tornamesa, contrario a W&W dueto de DJ'S que tocaron antes que él en el Kinetic Field, escenario principal del evento, que sí buscó interactuar con el público durante todo el show.
Pero ahí fue cuando más se demostró que el público del EDC es quién construye el ambiente y la festividad, pues pese a la poca interacción del ídolo de la electrónica el público siguió bailando hasta el final, poco antes de las 2 am.