El reciente caso de presunto robo de Daniela Castro sólo se une una larga lista de celebridades a quienes se les ha acusado de hurtar desde prendas hasta joyas y que ha quedado grabado en el historial de sus carreras.
Aunque la mayoría de estas personalidades bien podían pagar las costosas prendas que han sustraído, han optado por querer llevárselas sin pagar.
Algunas de las famosas, al momento de su aprehensión, han llegado a asegurar que padecen de cleptomanía y varias de ellas han llegado hasta los tribunales.
Sin duda la cleptómana más famosa de Hollywood es Winona Ryder, quien en 2001 fue sorprendida por las cámaras de la tienda Saks en Beverly Hills, robando.
En las imágenes se le aprecia paseando por el local, escogiendo prendas, quitando el precio y colocando la mercancía en un bolso negro. La actriz intentaba llevarse 17 prendas. Al final tuvo que pagar 20 mil dólares de fianza.
Otra actriz que quiso llevarse cosas sin pagar fue Amanda Bynes, ya que en 2014 intentó robar dos tiendas en Nueva York.
Primero en la tienda Barneys, donde se llevó un sombrero y quería a salir sin pagarlo.
Ese mismo día pero en otra tienda, Bynes intentó llevarse una camiseta entre sus brazos, finalmente la detuvieron y pagó la prenda sin que se levantaran cargos aunque ese sería el comienzo de un largo historial de escándalos para la actriz.
Lindsay Lohan es otra celebridad que además de sus excesos con las drogas y el alcohol también ha encontrado gusto por lo ajeno, tal como lo demostró en 2011 cuando fue acusada de robar un collar de la joyería Venice, de California.
La joya tenía un valor de 2 mil 500 dólares e intentaba robárselo al llevarlo puesto sobre su cuello. El video fue expuesto en medios de comunicación tras lo que hubo una denuncia en su contra.
Megan Fox declaró que cuando era adolescente fue vetada de todas las tiendas Wal Mart de Florida, ya que era asidua a robarse el maquillaje de estas tiendas.
Un robo más discreto fue el que intentó realizar Paris Hilton en 2011 cuando fue demandada por una marca alemana Damiani, que aseguró que la socialité no devolvió unas joyas valuadas en 60 mil dólares. Los abogados de Hilton aseguraron que no existían pruebas de eso y el litigio duró algunos meses.