Sorprende y agradecen los asistentes, las medidas de sanidad que se implementaron en los food trucks del Corona Capital 2021, los cuales tras la pandemia tuvieron que prepararse y adecuarse para seguir brindando un buen servicio como en ediciones pasadas.
Como cada año el Corona Capital, uno de los festivales más esperados en México además de la música estuvo acompañado de muchos puestos de comida y bebida para hacer más agradable la experiencia.
El reto fue implementar las medidas de seguridad sanitarias requeridas en los alimentos, así que, como en los autoconciertos y otros eventos al aire libre que realizaron durante la pandemia, no se vendieron productos abiertos o a granel, todo estaba sellado y sanitizado.
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Además, el personal que atendía los puestos estuvo todo el tiempo usando guantes, cubrebocas y mascarilla para evitar cualquier contaminación en los productos.
Bajo estas medidas cientos de personas pudieron disfrutar sus alientos sin miedo a algún tipo de contagio, mientras disfrutaron de la presentación de sus artistas favoritos.
Un festival sustentable
Como ya es sabido desde 2019 el Corona Capital se convirtió en un festival sostenible al cuidar el impacto ambiental, social y económico, entre uno de sus primeros proyectos fue el de convertir el sargazo en ladrillos para la construcción de viviendas.
"Empezamos esto desde mucho antes, pero en el 2019 fue el año cumbre porque nos dieron el certificado ISO como festival sostenible, y del mundo es de los pocos festivales que han logrado esto, ya cuidamos la separación de residuos, en el festival se controló muchísimo llevarlos a composta, y muchos a lugares de reciclaje”, comentó en entrevista a EL UNIVERSAL, Armando Calvillo uno de los organizadores del festival.
También retiró el uso de desechables que no fueran degradables u orgánicos, como el unicel aluminio, cubiertos o vasos de plástico.
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"Todos los vasos de cerveza que son los que más hay y los otros productos, ya son de fécula de maíz que es material compostable y eso fue un esfuerzo inimaginable", añadió.
El Corona Capital arrancó con un estricto control de seguridad y de medidas sanitarias. Las puertas del lugar abrieron en punto de las 13:00 horas y cada uno de los asistentes tuvo que pasar primero por un control de sanidad en donde se pedía el certificado de o la prueba negativa de Covid-19 de laboratorio privado autorizado .
Tras pasar este filtro a cada persona se le colocaba una pulsera para identificar a los que cumplieron con los requerimientos obligatorios y sólo así pudieron pasar al segundo filtro que consistía en la toma de temperatura, aplicación de gel y la revisión del boleto.
melc