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Mucha emoción y euforia se siente en el Autódromo Hermanos Rodríguez tras la llegada de miles de personas que esperan disfrutar del festival Flow Fest 2021 .
Entre las fuertes medidas sanitarias, se encuentra la revisión del comprobante de vacunación o prueba negativa de Covid - 19 de un laboratorio privado autorizado de cada asistente al momento de ingresar.
Desde la entrada se puede apreciar un desfile de tops coloridos combinados con el imprescindible cubrebocas, así como el regreso de los pantalones a la cadera o shorts, prendas que forman parte del uniforme de muchas jóvenes, quienes en cuanto ponen un pie dentro del lugar comienzan a bailar. Por su lado, los hombres también van con todo el "flow" en su vestimenta, en su mayoría traen gorra, pantalón de mezclilla, tenis y lentes obscuros.
Fotos: Germán Espinosa/ EL UNIVERSAL
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El día de hoy el sol salió a todo su esplendor, pero pese a ser una tarde acalorada, los asistentes buscan bailar y sudar al ritmo del perreo en cada uno de los tres escenarios del festival.
Ozuna, Winsin & Yandel y Farruko, son algunos de los artistas más esperados en esta edición, muchos de los asistentes que esperan con emoción verlos en el escenario en acción, aprovechan de otras atracciones de festival para seguir divirtiéndose, como la rueda de la fortuna, la cual es muy solicitada por los asistentes que esperan pacientemente por subirse.
Foto: Germán Espinosa/ EL UNIVERSAL
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El lugar está preparado con muchos stands de comida y food trucks, en donde se puede comprar bebidas refrescantes, entre ellas cervezas para refrescar después de tanto baile.
Tampoco podían faltar los souvenirs y en el lugar se pueden encontrar playeras, tazas, llaveros y hasta joyería como pulseras y aretes.
Foto: Germán Espinosa/ EL UNIVERSAL
El Flow Fest es uno de los festivales más esperados por miles de mexicanos, el cual tuvo que ser cancelado en 2020 tras declararse la pandemia mundial.
Conforme oscurece, el Flow Fest brilla
Foto: Germán Espinosa/ EL UNIVERSAL
Aunque la temperatura ha descendido un poco, el calor se siente a su máximo con miles de personas que cantan bailan sin cesar.
El sol poco a poco se va ocultando y el lugar empieza a iluminarse con luces de colores, moradas, verdes, amarillas, azules que dan un toque de antro gigante, en donde no para la fiesta.Cada uno de los tres escenarios del lugar lucen iluminados con diversos diseños que los hacen resaltar desde lejos.
El vestuario fluorescente de muchos asistentes empieza a resaltar por doquier.
"Estoy muy feliz de haber venido, yo quiero ver a Ozuna, pero todo el festival está bien, ya extrañaba salir y también tenia muchas ganas de perrear nuevamente, esta muy 'chingón' esto", comenta a EL UNIVERSAL Rodrigo Perea, asistente del festival.
fjb
