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Desde hace unas semanas, un par de actores mexicanos, de los cuales se reserva identidad, están trabajando con la policía mexicana para una película. El proyecto es dirigido por Alonso Ruizpalacios, recién nominado al premio Ariel por Museo, y que pretende ser un híbrido entre cine de ficción y documental.
“¡Es una reflexión sobre la policía y la impunidad!”, indica Daniela Alatorre, una de las productoras.
“Los actores son una pareja de policías y están de incógnito, hay una parte documental que ya se hizo y luego será ficción”, agrega.
Con el título de trabajo Una película de policías, se cuenta con el apoyo del Eficine, que permite a personas morales dar el 10% de su Impuesto Sobre la Renta a producción de filmes nacionales.
“Hay también un presupuesto para crear una capa de impacto y promover la esa empatía entre la gente y ellos; lo más complejo es no apuntar con el dedo (a los uniformados), así que estamos buscando una forma narrativa inusual para empatizar porque sí están en situaciones muy complejas”, subraya Alatorre.
Ruizpalacios, el realizador de Una película de policías, tiene en su filmografía, entre otros, el largo Güeros, triunfador en el festival de La Habana, y el corto Café paraíso.
La entrevistada es responsable del comité de selección de documental del Festival Internacional de Cine de Morelia, del cual fue productora general durante 10 años.
Fue productora de los documentales El general, de Natalia Almada, ¡De panzazo!, dirigida por Juan Carlos Rulfo y Carlos Loret de Mola y El ingeniero, de Alejandro Lubezki.
Junto con Elena Fortes, ex directora de Ambulante, fundó la compañía No Ficción, cuyo socio es Alejandro Ramírez, director de Cinépolis. Con dicha empresa ya realizó Midnight family, ganador en los festivales de Sundance y Guadalajara, y el cual retrata a la familia Ochoa, dedicada a una ambulancia privada. Y se encuentra en la producción de Río grande, Río bravo, proyecto de cortos para Netflix, donde Gael García Bernal es producutor ejecutivo.
La compañía tiene entre sus planes producir La perla marina, ópera prima como directora de Alatorre.
“Es la construcción, la comprensión de lo que significa ser mujeres en dos generaciones, una abuela y su nieta, lo empecé hace cuatro años”, informa.