Pese a tener una amplia trayectoria en el teatro con obras como "El Amante" y "Obsesión", Marina de Tavira ahora agradece poder llevar mensajes que trasciendan a través de la pantalla grande. Además de prestar su voz para un personaje en la cinta animada "Ana y Bruno", a estrenarse la próxima semana, también se prepara para el lanzamiento de dos cintas, una de ellas dirigidas por Alfonso Cuarón.
En entrevista, la actriz agradeció la confianza depositada por el cineasta así como expresar su entusiasmo de que "Roma" , el trabajo que los unió, vaya a estar disponible a través de una plataforma como Netflix .
“Tenemos que ir con los tiempos. Creo que si bien las salas cinematográficas ahí están y tienen que seguir estando y es una gran experiencia del cine, sin perder esa también tenemos que sumar a las nuevas plataformas y nuevos medios que hacen que las películas se puedan ver en más lugares del mundo, que en cualquier momento puedas decidir ver la película cuando tienes tiempo, cuando todo se confabula para que la gente se pueda sentar a ver la película y hay que tomar de la mano estas nuevas oportunidades”.
Tavira, quien recientemente fuera nombrada por la revista VARIETY como una de las 10 actrices a las que hay que mantenerlas en la mira, dijo que Cuarón además de ser un gran director, fue un gran maestro para ella. “Lo que te puedo decir es que mi experiencia fue maravillosa, me siento sumamente afortunada. Alfonso fue un gran maestro de vida y no tengo más que gratitud hacia él. Le aprendí que hay que confiar en que aquello que tu personaje requiere está en ti y dejarlo fluir”.
Además de "Roma", la actriz también participará en la cinta "Analfabetismo", con la que quiere llevar un mensaje poderoso sobre un tema que no siempre se pone sobre la mesa. “Esta película se estrenó en el Festival de Guanajuato y esta semana se estrenará aquí en la Ciudad de México. La película, que dirige Francisco Laresgoiti, se trata sobre la problemática del analfabetismo pero sobretodo de la comunicación.
“El analfabetismo como algo que provoca tal vergüenza en algunas personas que no se atreven a salir adelante y decirlo, y entonces genera una incomunicación que puede terminar en cuestiones incluso trágicas como lo veremos en esta película. Yo lo veo como un asunto de que a veces damos por hecho muchas cosas y no tenemos que dar por hecho que todo el mundo sabe leer y escribir y no es la única manera de comunicarnos”.