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Cuando J.J. Abrams debutó en “Star Wars”, Lawrence Kasdan, el guionista de “El imperio contraataca” y “El regreso del Jedi” le dio un consejo: “Star Wars” no es importante.
“Lo que importa es la sensación que provoque en la gente”, dijo Kasdan. “Y son muy fieles a ella. Son fieles a un cierto tipo de película”.
La pregunta de qué constituye una película de “Star Wars”, qué sensación debería causar y cómo debería sonar, estaba en el meollo de la batalla sobre la cinta de Han Solo, “Solo: A Star Wars Story” (“Han Solo: Una historia de Star Wars”), y la disputa llevó a que los directores Chris Miller y Phil Lord fueran reemplazados a mitad de la producción por Ron Howard.
Aunque el ritmo y el estilo de improvisación de la dirección de Lord y Miller eran parte del conflicto, el asunto principal era sencillamente el tono.
Lord y Miller, el dúo de cineastas irreverentes de comedias con chistes autorreferenciales como “21 Jump Street” (“Comando especial”) y “The Lego Movie” (“La gran aventura Lego”) querían llevar a “Solo” a los terrenos de “Guardianes de la Galaxia”, pero Kasdan no.
“En mi mundo puedes divertirte con el tono, pero nunca reírte del tono”, dijo Kasdan en una entrevista junto a su hijo y coguionista John Kasdan, al día siguiente del estreno de “Solo” en el Festival de Cine de Cannes. “Vivimos en una cultura muy autorreferencial y hay una tendencia a reírse de las cosas incluso antes de que salgan”.
La dificultad de encontrar el equilibrio entre recapturar el espíritu de la trilogía original de Lucas y permitir que una nueva generación de cineastas ponga su sello en “Star Wars” podría ser el problema creativo más complicado que enfrenta la presidenta de Lucasfilm, Kathleen Kennedy.
Debajo de los millones de dólares en taquilla y mercancía hay señales de una crisis existencial creciente en una galaxia muy, muy lejana a medida que se aparta más y más de la visión original de George Lucas.
En “Rogue One: Una historia de Star Wars”, Gareth Edwards fue reemplazado por Tony Gilroy. Colin Trevorrow (“Jurassic World”) iba a dirigir el Episodio IX en 2019 antes de que el director de “Force Awakens” J.J. Abrams fuera convocado nuevamente.
E incluso “Los últimos Jedi” de Rian Johnson que según algunos críticos fue la que tuvo más éxito para refrescar “Star Wars” con una sensibilidad cinematográfica diferente, creó opiniones encontradas entre los fans.
Algunos aplaudieron los cambios de Johnson pero otros los criticaron y la división afectó los resultados en taquilla. “Los últimos Jedi” sumó 1.300 millones de dólares a nivel mundial, pero las ventas de boletos cayeron rápidamente después de las primeras dos semanas de su estreno y recaudó apenas 42,6 millones en China. “Solo” llegó a Cannes — uno de los festivales más prestigiosos y mediáticos del mundo — con la mira puesta en impulsar su impacto mundial.
Gran parte de la conversación en torno al estreno de “Solo” ha sido estimar hasta qué punto es una película de Lord y Miller y hasta qué punto de Howard. Pero el mayor porcentaje pertenece a Kasdan, quien estableció la premisa de la película hace años, y cuando el tenor cómico empezó a cambiar, creyó que tenía cierto derecho sobre la película.
“Algo de eso es cierto, sin duda. Me emocioné porque quería que sonara de cierta manera. Todo se trata de sonido, tono y voz”, dijo Kasdan. “Estábamos muy emocionados de tener a Phil y Chris en la película. Fue una película muy difícil y filmaron gran parte de ella. Y fue una lucha mantener esa voz y escuchar ese tono”.
Cuando George Lucas dejó de tener un papel activo en la telenovela de ciencia ficción que creó, esto dejó a Kasdan como el tejido principal, y el más respetado, que conectaba el pasado y el presente de “Star Wars”. Kasdan de 69 años, quien también coescribió “El despertar de la Fuerza”, ha emergido como una especie de guardián del alma de “Star Wars”.
“Larry, tras escribir ‘El imperio’ y ‘Jedi’, entra en esta ecuación de manera diferente a cualquier guionista”, dijo John Kasdan. “Está en una posición muy particular y demandante, ser quien mantiene viva la llama y apoya a llevarla a una nueva era con nuevos cineastas”.
Lord y Miller, quienes tienen créditos como productores ejecutivos, sólo han hablado públicamente una vez sobre el pleito. En noviembre, Lord dijo que había simplemente “una gran separación que cruzar y demostró ser demasiado grande. A veces la gente se separa y es muy triste y es realmente decepcionante, pero sucede y aprendimos mucho de nuestros colaboradores”.
Las reseñas para “Solo” han sido principalmente positivas (70% fresco en Rotten Tomatoes hasta el jueves), los críticos se han impresionado por la poca evidencia que hay de la producción esquizofrénica de la película. John Kasdan considera que el producto terminado se beneficia con “la tensión entre la sensibilidad de Larry y la sensibilidad de Chris y Phil”.
“Fue brutal y doloroso, pero lo que también surgió de eso son momentos como cuando Han y Chewbacca se conocen”, dijo el guionista de 38 años.
Según estimados, en el fin de semana de estreno podría recaudar 170 millones, lo que sugiere que los fans siguen emocionados por la película protagonizada por Alden Ehrenreich en el papel emblemático que fuera de Harrison Ford — y quizá más importante aún, Donald Glover en el papel de Lando Calrissian.
(Kennedy, quien ha sentido el clamor por Glover, ha dado indicios de que una película sobre Lando podría suceder).
El popular Howard también ayudó a estabilizar “Solo”. Es otro de los que comparten algo de la continuidad con Lucas, tras haber trabajado con él en “American Graffiti” de 1973 y “Willow” de 1988. Howard, un viejo amigo de Lucas incluso pasó por el plató el primer día que trabajó el director.
“George entiende realmente lo que el medio puede hacer en términos de transportar verdaderamente al público, lo que descubrí a detalle cuando entré a ‘Solo’. Comencé a ver lo dimensionado que está el tono”, dijo Howard. “Es juguetón pero también es centrado en cuanto a sus temas y es serio. Es visual e imaginativo, y a pesar de esto hay algo conectado a nuestra experiencia previa de alguna manera”.
Al final de cuentas Kasdan no cree que el alma de “Star Wars” sea demasiado profunda, tampoco algo sobre la Fuerza o una metáfora política.
“Lo que me gustó es que había un tipo que entraba en una cantina”, dijo Kasdan. “Un pistolero con un gran patiño”.
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