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El director James Cameron dice que las mujeres que están hablando de sus experiencias con el acoso sexual son muy valientes. Esto a propósito de que la actriz Eliza Dushku, con quien trabajó en la película True lies (Mentiras verdaderas), dijo haber sido acosada por el coordinador de Stunts de la cinta, Joel Kramer.
“Pienso mucho en ello. Eliza es una mujer muy valiente por hablarlo. Todas las mujeres que lo están haciendo lo son. Pero esto es una epidemia mundial, no sólo ocurre en Hollywood. El hecho de que haya ocurrido en nuestras narices nos obliga a crear una zona de trabajo donde todo el mundo se sienta a salvo, que se sepa que si hay malas acciones, habrá consecuencias”, destacó el cineasta durante la presentación de la serie James Cameron’s: Story of Sciencie Fiction, de la cadena AMC.
El cineasta agregó que es momento de escuchar a las mujeres.
“Todas las actrices que son famosas ahora no tuvieron una oportunidad hace 10 años. Me rompe el corazón que esto haya pasado. Pero Hollywood tiene la oportunidad de hablar sobre temas sociales y es bueno. Lástima que esto les pasó a todas estas mujeres, pero es un tema mundial.
“Donde haya hombres en posición de poder, deben saber quiénes son y en su defecto, enfrentar las consecuencias de sus actos”, añadió el cineasta.
La actriz también conocida por su papel en la serie de Buffy la caza vampiros narró en sus redes sociales el incidente que tuvo con el miembro de la producción, quien entonces tenía 36 años.
“Para ser claros, en el transcurso de esos meses ensayando y filmando True lies, fue Joel Kramer el responsable de mi seguridad ... A diario ponía cables y arneses en mi cuerpo de 12 años. Mi vida estaba literalmente en sus manos: me colgó al aire libre, desde una grúa torre, encima de una torre de oficinas, con más de 25 pisos de altura. Mientras que se suponía que era mi protector, él fue mi abusador”, narró.
La actriz detalla además el abuso sexual cometido en una habitación de un hotel de Miami, cuando Kramer frotó su cuerpo, sólo cubierto con una pequeña toalla en el abdomen, con el de ella, mientras Dushku fingía estar dormida.