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Habían pasado ocho años desde el linchamiento de trabajadores universitarios en San Miguel Canoa , Puebla, cuando a Roberto Sosa Rodríguez lo llamó el realizador Felipe Cazals.
Los dos se conviertieron en punta de lanza para el proyecto filmado en 1976 y en la que el actor daría vida a Julián González Báez, uno de los sobrevivientes, al que le habían cortado los dedos de una mano, con un machetazo.
Hoy el histrión falleció, informó la Asociación Nacional de Intérpretes (ANDI) en su cuenta de Twitter.
"¡Descanse en paz!", colocó en un mensaje, acompañado de una foto del actor y director teatral.
Sosa fue padre de los también actores Roberto Sosa y Evangelina Sosa , quienes han tenido trayectoria en la pantalla grande, así como de Gabriela Sosa .
El histrión llevaba a sus hijos a sus clases o ensayos, con quien fuera esposa, Evangelina Martínez, hablaba frente a sus hijos de libros y viajes.
"Ellos (sus papás) nos hicieron ver que la actuación era un juego, un divertimento", dijo Sosa hijo, en una entrevista televisiva, en algún momento.
Pero nunca apoyó que sus hijos comenzara en lo escenarios antes de los 10 años, pues prefería que se prepararan académicamente.
En cine participó en "Meridiano 100", una historia de guerrilleros y "María de mi corazón", interpretando a un chofer de camión. Para "Longitud de guerra" le tocó encarnar a un capitán de guerra de fines del siglo 19.
"Te envío mi gran cariño hasta el cielo y por siempre, vivo en mis recuerdos", escribió la actriz Gabriela Goldsmith en su cuenta de Twitter.
La Asociación Nacional de Actores subió un mensaje lamentando el fallecimiento.
fjb
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