Una ex empleada del actor Michael Douglas lo acusó ayer de acosarla constantemente y haberse masturbado en su presencia, lo que el ganador de dos Oscars niega.
Susan Braudy, periodista y autora de dos libros, dijo que sufrió de esta conducta abusiva durante los 80, cuando estaba encargada de la oficina en Nueva York de Stonebridge Productions del actor.
“Pensó que era el rey del mundo y que podía humillarme sin ninguna repercusión”, dijo a la NBC.
El incidente de la masturbación ocurrió en una reunión de trabajo en su apartamento en 1989, cuando Douglas estaba en el pico de su carrera, tras protagonizar películas como Wall Street o Atracción fatal.
“Se deslizó hacia el piso, se desabrochó el cinturón, metió su mano dentro de la ropa interior y comenzó como a acariciarse, tenía mucho miedo”, recordó.
Braudy —autora de varios libros y nominada a un Pulitzer— indicó que en su experiencia con Douglas lidió casi siempre con un lenguaje profano y sexual, sin contar los comentarios sobre su vida sexual y sus amantes y las observaciones degradantes sobre la apariencia de su entonces empleada.
Douglas se adelantó la semana pasada, en una “iniciativa preventiva”, a negar la denuncia, que aún no se hacía pública. Tampoco se sabía que era Braudy. “Es una mentira total, una invención, no hay nada de verdad en eso”, dijo