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cesar.huerta@eluniversal.com.mx
Un hechizo y dos mujeres de distintas clases sociales que intercambian cuerpos está en el ambiente de la Ciudad de México.
Desde hace unos días Sofía Sisniega (Aquí en la tierra) se ha convertido en Mariel Molino (Luis Miguel: la serie) y viceversa, mientras que sus amigos no saben por qué su cambio tan radical.
Ambas protagonizan la película Locas por el cambio, ópera prima de Ihtziar Hurtado, ahora en rodaje.
“Es una historia que se ha repetido y nunca dejará de hacerse, porque para el ser humno es entretenido imaginarse estar en los zapatos de otra persona; amanacer como alguien más, como si eres chiquito, estar en alguien grande”, comenta la realizadora.
“Hemos visto películas como Freaky friday (con Lindsay Lohan) en donde la mamá y la hija no quieren ser la otra, aquí la diferencia es que una de las chicas que pasa por esto, sí quiere estar en el cuerpo de la otra”, agrega.
Sisniega interpreta a Paulina, una chica de clase media que un día amanece en casa de la chica rica; mientras que Molino en Paula, una mujer con esposo y trabajo.
“Y el marido amanece amoroso y entonces ahí surge la comedia”, detalla la cineasta.
La noche en que EL UNIVERSAL asistió al set, una casa de Coyoacán gue ambientada como embajada francesa, a la que el personaje rico, ya con el alma de la otra, debe practicar el idioma, lo cual no logra.
“Y entonces es cuando pasan cosas simpáticas, porque obviamente el personaje no sabe cómo hacerle”, comenta Molino.
El guión comenzó a escribirse hace cuatro años, siendo ahora producido por Corazón Films y Época, esta última hacedor de No manches Frida y Purasangre.
El más reciente proyecto nacional con temática similar fue Dame tu cuerpo, en el que una mujer (Luz Maria Zetina) a punto de contraer matrimonio, cambia de cuerpo con el amigo del novio (Rafael Sánchez Navarro), a quien no soporta.
En Hollywood también está el proyecto Este cuerpo no es mío, con Rob Schneider y Anna Faris.
“Aquí lo que funciona son las clases sociales, vimos el resultado de Mirreyes vs godínez”, ataja el productor de Locas por el cambio, Mauricio Argüelles, durante un receso de la filmación.
“Para mostrar los dos mundos se ha filmado en las Lomas y en Santa María la Ribera (Ciudad de México)”, apunta.
En el elenco también figuran Juan Pablo Gil (Nosotros los nobles), como el enamorado del personaje de Paula y José María Torre (Señora Acero) como el novio millonario de ésta.
“No quisimos hacer en sátira el personaje y es chistoso, porque tengo amigos así, que son de cuna de oro y no entienden la otra parte, para ellos es el avión y el barco, pero son como mam... encantadores. Aquí lo jugamos más o menos, en no ser el cliché del niño fresa, sino de una persona que no es mala, sólo que ha vivido como niño rico toda su vida”, explica Torre.
