En la actualidad, el ciberespacio es un lugar en donde las personalidades y tendencias emergen con rapidez, tal es el caso de Chingu Amiga, quien hoy es una de las creadoras de contenido más influyentes y que tuvo que sobreponerse al desempleo en la pandemia gracias a la generación de contenidos.
Sujin Kim, su nombre real, es una influencer surcoreana radicada en México que empezó su carrera siendo maestra y que ahora cuenta con todo un imperio digital, cuyos secretos reveló durante la tercera edición de la convención VidCon México.
Cuenta que comenzó su viaje al estrellato digital en un momento de incertidumbre, durante la pandemia del Covid-19: “La universidad en que yo trabajaba se cerró por la pandemia, por eso empecé a subir videos a YouTube”, compartió.
Al empezar a subir videos cortos, consideró la participante del programa LOL: last one laughing, vivió una experiencia inusual.
“Un chico de repente me habló y me preguntó que si quería hacer colaboraciones. En esa época yo tenía cinco visitas en mi YouTube, se me hizo extraño que quisiera hacer algo conmigo con tan pocas visitas”.
Chingu aceptó, pero comenzó a distanciarse al percibir que las intenciones del chico no eran genuinas, ya que el interés parecía centrarse en tener una “novia coreana” únicamente para alinear su contenido con temas asiáticos.
Para pasar la hoja, la influencer solía anotar sus momentos graciosos para luego recrearlos, práctica que poco a poco ha ido abandonando, en pro de capturar y compartir la espontaneidad del instante.
“Descubrí que a la gente le gusta lo natural, que sea lo menos actuado posible, sólo que si pasa algo divertido intento grabar el momento para no perder la originalidad”.
Chingu estudió economía en Seúl, razón por la que está al tanto de las métricas de sus videos y su rendimiento: “Si a un material le va mucho mejor que los otros, ahí pienso qué es lo nuevo que tengo que aprender. Me siento muy mam... diciéndolo, pero mi secreto para el éxito es la disciplina”.