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Céline Dion no tiene límites. Después de ser diagnosticada en 2021 con el síndrome de la persona rígida, que también afectó su poderosa voz, la cantante canadiense está regresando gradualmente a los escenarios.
Tras deslumbrar con su interpretación de "Hymne à l’amour" de Édith Piaf durante los Juegos Olímpicos, ahora vuelve a cautivar al público en el evento "1001 Seasons of Elie Saab" en Riad, Arabia Saudita.
Dion desfiló con un espectacular vestido rosa bordado y una capa translúcida a juego de la marca de alta costura, cerrando el evento con dos de sus grandes éxitos: "I’m Alive" y "The Power of Love".
Complementó su look con pendientes plateados, anillos y pulseras. Su cabello estaba recogido en un moño, y la acompañaron bailarines en el escenario.
El desfile contó con la presencia de modelos como Halle Berry, Candice Swanepoel y Adriana Lima, entre otras.
Previo al evento de moda, Céline Dion rindió homenaje a los 54 años de carrera del diseñador libanés Elie Saab, luciendo un vestido rosa con mangas voluminosas que evocaban flores, un detalle que acaparó las miradas.
Su maquillaje fue sencillo: un toque de rubor y lápiz labial rosa suave.
El mes pasado, la cantante asistió al concierto de Adele en Las Vegas, donde ambas protagonizaron un emotivo encuentro que conmovió al público.
Durante dos años, Céline se preparó para volver a cantar. La enfermedad que padece, que no tiene cura, provoca espasmos musculares intensos, y en ocasiones ha sufrido rupturas en las costillas.
"Son calambres, pero es como si estuvieras en una posición en la que no puedes desbloquearlos", explicó a "Today" este año.
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