No es tan fácil quitarse la piel de Gema después del set de grabaciones, dice la actriz Valentina Buzzurro vía telefónica. Su personaje en la telenovela "Vencer el desamor", de Rosy Ocampo, tiene una de las historias más tristes, pues es una joven de 15 años, originaria de una pequeña población a la que su madre orilla, por ignorancia, a juntarse con un hombre mayor que ella para olvidarse de la pobreza, pero quien termina siendo su golpeador, abusador y embarazándola, cuando ella lo único que quiere es seguir estudiando, hacer una carrera.
“Hace unos días estaba viendo un capítulo con mi mamá y las dos andábamos llorando. Interpretar a Gema ha sido mucho aprendizaje, pero no es tan fácil cerrar la llave, yo a veces me ponía a llorar en mi cuarto por todo lo que vive”, dijo.
A sus 20 años, esta es la primera telenovela en la que Valentina actúa, pues su camino ha estado marcado por películas como El ombligo de Guie’dani, Olimpia y la serie Los Pecados de Bárbara. Cuenta que al principio le costó un poco de trabajo aceptar hacer una telenovela, pero ha sido un viaje lleno de cosas satisfactorias.
“Ha sido una bomba de experiencia, he crecido mucho a nivel actoral, a mí me había picado un bicho raro y decía que nunca iba a hacer telenovelas porque eran muy criticadas, y ahora que la vida me ha puesto en esta oportunidad me hace sentir muy feliz porque no hay actrices de teatro o de cine, una sólo es actriz”.
Y es que a su personaje, que posteriormente llega a trabajar como empleada doméstica a la casa del personaje de Daniela Romo, le tocará lidiar con la ignorancia de su mamá, y con los consejos que le dan los mayores, pero que no siempre son los mejores.
“Gema se enfrenta a muchísimos caminos o posibilidades que las chicas adolescentes que están embarazadas tienen, había cosas que yo leía en el libreto y que se me hacían tan tristes que hasta decía yo que no quisiera hacer esas partes, pero es una realidad”, reconoció.
El próximo año, Valentina estrenará la película Gringa, donde dará vida a otra joven pero más tradicionalista.