El 2022 empezó con un brillo especial para la estrella del pop, Britney Spears. Tras romper las cadenas de una tutela que la mantuvo en una agobiante restricción financiera y mental durante trece largos años, y después de encontrar el amor junto al joven entrenador Sam Asghari, todo parecía encaminarse para la intérprete de "Toxic". Sin embargo, la vida de la famosa comenzó a tomar un rumbo inesperado.
Todo comenzó con sus publicaciones en las redes sociales, donde la artista aparecía en atuendos escasos e incluso sin ropa, danzando y llorando frente a la cámara. En ocasiones, compartía mensajes inquietantes que generaban preocupación entre sus seguidores, que temían por su bienestar mental, llegando a llamar a la policía para asegurarse de su salud.
A pesar de que Asghari había sido su apoyo en momentos difíciles a lo largo de la relación y la defendió de críticas y controversias recientes, el matrimonio llegó a su fin el pasado agosto. Sorprendentemente, Britney continuó compartiendo contenido en su perfil de Instagram como si nada hubiera sucedido.
En medio de las controversias que la rodeaban, comenzaron a surgir detalles de su libro de memorias, "The Woman in Me". En esta obra, Spears revela aspectos íntimos de su relación con Justin Timberlake, incluyendo el momento en que estuvieron al borde de convertirse en padres. Sin embargo, el embarazo que tuvo que ser interrumpido debido a la negativa del miembro de la boy band NSYNC de asumir la responsabilidad en ese momento. Además, compartió otras supuestas verdades que generaron críticas entre los usuarios en las redes sociales.
En respuesta a las opiniones negativas, la cantante finalmente explotó. Aclaró que su intención al escribir el libro no era ofender a nadie de ninguna manera.
Ayer 20 de octubre expresó: "Esa era yo en ese entonces... eso ya es cosa del pasado. No me gustan los titulares que estoy leyendo... ¡Es precisamente por eso que me retiré del negocio hace 4 años!"
Asimismo afirmó que la mayoría del contenido de su libro se remonta a hace 20 años, pero ha logrado avanzar en su vida. "Este es un libro que no sabía que necesitaba escribirse... aunque algunos podrían sentirse ofendidos, me ha dado un cierre de todas las cosas para un futuro mejor", declaró.
Tras ello, el icono pop de finales de los 90 e inicios de los 2000 empezó a eliminar algunas de sus publicaciones en la red social y posteriormente decidió desactivar su cuenta de Instagram. No es la primera vez que toma esta decisión, ya que en el pasado también se ha tomado descansos temporales de la plataforma virtual.