Brian May, el icónico guitarrista de Queen, sorprendió a sus seguidores al revelar que sufrió un derrame cerebral.
En un video compartido en Instagram, May detalló cómo, tras el alarmante episodio, ha logrado “volver a tocar la guitarra” y mostró sus habilidades moviendo su mano para tranquilizar a sus fans. El incidente fue especialmente preocupante debido a que el derrame le impidió temporalmente utilizar su brazo izquierdo, una parte crucial para su desempeño como músico.
“Me asustó un poco, tengo que decirlo”, confesó Brian, tras mencionar que había perdido el control total de dicha extremidad.
Afortunadamente, el guitarrista recibió atención médica rápida en el Hospital Frimley en Inglaterra. “Me llevaron al hospital con las luces azules parpadeando, todo fue muy rápido. Recibí un tratamiento increíble y eso me ha permitido estar aquí, contando esta historia”, agradeció May.
Aunque Brian está experimentando mejoras diarias, los médicos le han recomendado tomar precauciones para evitar complicaciones. Entre las restricciones, se incluye evitar actividades que aumenten su ritmo cardíaco, como conducir. “Estoy castigado”, bromeó el guitarrista sobre la situación y añadió que no puede hacer casi nada.
Aprovechando la oportunidad, el guitarrista pidió a sus fanáticos que no le envíen mensajes de compasión para evitar saturar su bandeja de entrada: “Eso saturaría mi bandeja de entrada y realmente lo odio”, dijo con una sonrisa. En cambio, animó a sus seguidores a concentrarse en las buenas noticias, como su capacidad para seguir haciendo música.
Este no es el primer susto para el músico. En 2020, Brian May sufrió un ataque cardíaco que lo llevó al borde de la muerte. En esa ocasión, los médicos descubrieron que tenía tres arterias bloqueadas y le realizaron una angioplastía para colocarle tres stents, evitando así una cirugía a corazón abierto.