A Natalia Beristáin le inspiró ser hija de los reconocidos actores Julieta Egurrola y Arturo Beristáin para poder crear su más reciente filme, "Ruido".
La directora de "Luis Miguel, la serie" y el filme "Los adioses" se encuentra en posproducción de la historia en la que una mujer está en busca de su hija desaparecida.
El filme es protagonizado por Egurrola, por lo que Beristáin se suma a la pequeña lista de directores en el mundo que tienen bajos sus órdenes cinematográficas a alguno de sus padres.
Lee también: Foto de Humberto Zurita con Kika Edgar alborota las redes
“No me habría interesado hacer una película sin ser hija de quien soy y me importaba mucho que mi mamá fuera parte de la narrativa. Había días y días, horas y horas (donde eran madre e hija, directora y actriz), pero siempre ambas profesionales”, dice.
Ruido fue uno de los varios proyectos que se fue posponiendo por la pandemia del Covid-19. Inicialmente estaba programado para rodarse durante la segunda mitad de 2020, ahora ya la tiene Netflix sin descartar llegada a pantalla grande.
Adrián Vázquez (Placa de acero) integra al elenco interpretando al fiscal.
Natalia y Julieta ya habían trabajado juntas en la tesis escolar de la cineasta y luego en una obra de teatro, en donde la cineasta era asistente.
“Fue emocionante trabajar con una actriz como ella, sabiendo su capacidad, los alcances que tiene”, subraya la egresada del Centro de Capacitación Cinematográfica.
Poder femenino. Con casi dos décadas de experiencia en set de filmación, ganadora en certámenes fílmicos con No quiero dormir sola y Los adioses, así como figura a la que recurren series televisivas, Natalia forma parte del Compendio de Cineastas Contemporáneas iniciativa organizada por el Festival Internacional de Cine de Morelia.
Lee también: Critican "el trono" de Vicente Fernández: "Con tanto billete y todo roto"
En la iniciativa se reconocen a 12 cineasta mexicanas en activo, a través de videos y la proyección de algunos de sus trabajos en cortomentrajes y largometrajes.
“Hemos tenido la fortuna de habitar este tiempo, espacio, donde en algunos ámbitos, sobre todo en la cultura, se tiene mayor apertura a las minorías, pero que fue una lucha de años, que a nuestras precursoras les costó y a quienes nos sigue dejarle un camino más aplanado”, considera.
Beristáin indica que durante la pandemia tuvo la oportunidad de acercarse a colegas para reconocerse, ya que actualmente en México existen, al menos, 100 directoras activas de largometraje.