Aunque es considerada una de las mujeres más bellas del mundo y una de las modelos mejor pagadas de la industria, Bella Hadid habló sobre cosas que pocas veces ha revelado, sus cirugías pláticas y su salud mental.
La modelo narró a la revista Vogue los problemas y presiones a los que se ha enfrentado desde niña, los cuales la llevaron a operarse la nariz siendo muy joven, a la edad de 14 años, acción de la que se arrepiente.
Aunque desde hace algunos años Bella negaba haberse sometido a algún tipo de cirugía estética, confesó que hasta ahora es que se siente fuerte y segura para contarlo y prevenir que más niñas comentan el error que ella cometió.
Instagram Bella Hadid.
En la entrevista con la revista, Hadid reveló la mala relación que tenía con su madre Yolanda Hadid , quien también había sido una súper modelo y razón por la cual sentía que vivía a su sombra.
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“Yo era la hermana más fea. Yo era la morena. No era tan genial como Gigi, ni tan extrovertida. Eso es lo que la gente decía de mí y, desafortunadamente, cuando te dicen lo mismo tantas veces simplemente lo crees”, dijo.
“Siempre me pregunto, ¿cómo una chica con inseguridades, ansiedad, depresión, problemas de imagen corporal, problemas para comer, que odia que la toquen, que tiene una intensa ansiedad social? ¿Qué estaba haciendo para entrar en este negocio?”, reflexionó.
La también hermana de Gigi detalló que aunque la gente la veía fuerte sobre la pasarela, siempre fingía ya que no deseaba que las personas la vieran débil y vulnerable.
“La gente puede decir cualquier cosa sobre cómo luzco, cómo hablo, cómo actúo. Pero en siete años nunca perdí un trabajo, cancelé o llegué tarde a una cita. Nadie puede decir que no trabajé duro”, explicó.
Salud mental y anorexia
Hadid detallo que la rinoplastía es la única cirugía a la que se ha sometido, pero ha padecido el síndrome del impostor, cuando la gente dice que no merece nada de lo que tiene.
Bella también hablo sobre su salud mental y confesó que padeció problemas mentales en sus primeros años razón por la que al entrar a la adolescencia sufrió de anorexia.
Archivo AP.
“Tenía esta aplicación de conteo de calorías, que era como el diablo para mí. Empacaba mi pequeño almuerzo con tres frambuesas, mi rama de apio. Solo estaba tratando, me doy cuenta ahora, de sentirme en control de mí misma cuando me sentía tan fuera de control de todo lo demás. Apenas puedo mirarme en el espejo hasta el día de hoy debido a ese período de mi vida”, añadió.
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