La famosa frase “la manzana nunca cae lejos del árbol” habla de los orígenes. Es decir, que por más que alguien se esmere en ser diferente a sus padres, es inevitable heredar algunos defectos de sus progenitores.
Este concepto de la herencia familiar se aborda en la serie Apples never fall, un thriller adaptado del más reciente best seller de la escritora Liane Moriarty.
“La forma en que fuimos criados es una parte fundamental de en quiénes nos convertimos como adultos, y no importa si lo rechazamos o lo aceptamos”, dice la actriz Alison Brie.
La actriz interpreta a Amy Delaney, quien vive tranquilamente con sus padres y tres hermanos, hasta que aparece una joven herida en su puerta. La llegada inesperada cargada de misterio sólo complica más la relación entre ellos, luego de que Joy, la matriarca de la familia, desaparece.
“A menudo ocultamos muchas cosas a los miembros de nuestra familia. Además, pueden juzgarnos muchos o no siempre ser solidarios. La serie transmite mensajes sobre la honestidad, pero el importante es: todas las familias son complicadas”, dice Brie entrevista con EL UNIVERSAL.
Frutos, tarde o temprano
La multipremiada actriz Annette Bening, conocida por su papel en Nyad, adopta el rol principal en la serie, interpretando a Joy Delaney. Junto a ella, Sam Neill, célebre por su participación en Jurassic Park, da vida a Stan Delaney, el esposo.
El matrimonio, que parece ser el ejemplo de “perfección”, se ve notablemente sacudido luego de que una serie de eventos que evidenciarán que su “impecable relación” oculta algo más.
“Amy tiene una relación diferente con cada miembro de su familia. Esta serie muestra cómo revelamos diferentes facetas de nosotros mismos”, cuenta Brie.
“Creo que el gran mensaje de la serie es que llames a tu mamá. Hay un mensaje claro sobre expresar a los miembros de tu familia cuánto los amas”, agrega la actriz.
Apples never fall ya está disponible en Universal + y cuenta con siete episodios.