Más Información
La relación amorosa que mantiene el rapero Alemán con la cantante Akasha asegura que lo ha hecho pensar en nuevos objetivos personales que lo han obligado a cambiar de rumbo sus letras y su música, antes enfocada en temáticas como la fiesta, las drogas y el barrio.
“El elixir de este disco es el amor y la madurez que tengo como artista. Llega una edad en la que ya no te tomas las cosas a juego, donde ya tienes otras prioridades, donde no nada más es andar en la loquera, la calle; en la que piensas en tener familia, en dejar otro legado, algo diferente”, señala en entrevista.
El rapero, que formó parte del cartel de la última edición del Vive Latino, también se decidió a meter músicos en vivo en toda su producción, algo que otros raperos como el español Kase.O hicieron con proyectos como Jazz Magnetism.
Alemán, de 33 años, busca replicarlo, convicción de la que surge el título de su nuevo disco, Haciéndolo fino.
“Me esperé a meter músicos en mis proyectos, siempre fue meramente el boombap, el beat creado desde la computadora, ahora decidimos crear algo con más cuerpo. Metiendo músicos ya no va ser sólo el sonido del beat que se repite toda la rola. Me siento listo para decir, ‘queremos seguir haciéndolo fino’.
“Después de lo que ya hemos hecho, mi actualidad personal me llevó a actuar en este sentido del camino”, agrega.
Sus letras, que siempre habían retratado lo complicado que es vivir en zonas marginadas del país, como Cabo San Lucas, Baja California, de donde él es originario, también dieron un vuelco. Ahora, retratan temas como la importancia de ver hacia atrás para definirse en el presente.
“Llegué a un nivel de lírica que no había sentido en otras canciones como ‘Rucón’; acá voy contar mi historia, mi vida, a profundizarla, compartirle a la gente lo que he tenido que pasar para estar acá el día de hoy”, dice.
El nuevo álbum aún no cuenta con fecha de salida.