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cesar.huerta@eluniversal.com.mx
Sabe que no es actor pero el standupero Ricardo O’ Farril aceptó explorar esa faceta en la película Ni tú ni nadie, donde será el antagónico de su colega Sofía Niño de Rivera.
En la comedia, que estrenaría en el último trimestre del año, interpreta al seguidor de una ex estrella televisiva (Andrés Almeida, Los Héroes del Norte) en decadencia.
Sofía es la mánager de éste, quien realmente no lo ayuda mucho en el repunte de su carrera.
“Justo acepté para tantear y decir si vuelvo o no a la actuación, si el público quiere o no”, dice O’ Farrill divertido.
“En la película Sofía, una buena amiga, es la mánager del actor y pues con mi personaje se caen bien, pero se odian y ambos son muy nerds”, agrega.
Ni tú ni nadie, dirigida por Gabriel Guzmán (Hecho en China), cuenta con la actuación de Adriana Louvier (Más negro que la noche), Mía Rubín (El que busca, encuentra) y Anabel Ferreira (Tercera llamada) quien le demostró un buen grado de improvisación.
“Lo hizo en una escena, me pegaba y me decía Woody Allen mustio y Andrés es impresionante el timmig que tiene, decían acción y comenzaba a ser muy chistoso. Me gustó mucho la experiencia, ojalá haya más oportunidades después”, expresa.
A pregunta expresa, O’Farrill considera que, a diferencia de los youtubers, los standuperos no necesitan tantas clases de actuación al pararse frente a un cámara.
Indica que Niño de Rivera, quien ya colaboró en el largometraje Una mujer sin filtro y la serie Club de cuervos, se lo ha hecho ver.
“Lo que hace el comediante es decir: miren, el humano es así y hace tal cara, lo que lo hace muy real, y eso hace más fácil el reto de actuar”, explica.
O’Farril fue conductor de Deberían estar trabajando de TV Azteca y en 2015 grabó el especial Abrazo genial que fue producción original de la plataforma digital Netflix.
Mientras su cuenta oficial de Facebook registra más de 430 mil seguidores, diariamente incrementándose, en la red social de Twitter se contabilizan más de 220 mil.
Nuevo espectáculo. Por ahora se encuentran preparando lo que será su proyecto Ciudadano mexicano, primero autobiográfico.
Sería entre agosto y septiembre que arrancaría gira, teniendo un relato que inicialmente lo pondrá en un avión en problemas, por lo cual comienza a recorrer su vida.
“Es ver cómo he ido interactuando con el país y las costumbres que te dan de pequeño y ya de adulto cuál es el punto de vista, es ir viajando entre el pasado y presente”, detalla.
La semana pasada lanzó, a través de youtube, de manera independiente y gratuita, su especial Ricardo O’Farrill: live from Pachuca, grabado el año pasado, en el cual habla sobre política, el sistema educativo mexicano y el enojo del papa Francisco
“Pachuca fue una ciudad a la cual le fuimos tomando cariño y la gente respondía bien; por el temblor (del 19 de septiembre) tuvimos que aplazar (la grabación) un mes, la gente fue comprensiva y tenía que darse ya a conocer a todos”, indica.
Lo curioso es que al entrevistado no le gusta ver en pantalla. Si por él fuera, no lo haría jamás.
“Pero el trabajo lo obliga a uno, en Azteca me decían que Eugenio Derbez todo lo hacía, se apegaba a todo el proceso y ahí está lo que es”, dice.
