Adriana Paz se enteró del premio a Mejor Actriz en Cannes, obtenido junto con Zoe Saldaa, Selena Gómez y Karla Sofía Gascón, prácticamente en el vuelo que la trajo de vuelta a México la tarde de ayer.
Luego de la premier de Emilia Pérez en festival galo, se fue a Berlín a visitar a su hermano menor que se había accidentado, para ver cómo estaba y pasar unos días con él.
“Me estoy enterando por mensajes mientras vuelo y sólo pude llorar de emoción. Quien me vió ahora en el avión llorar y luego reírme pensará "qué le pasa a esta mujer" estoy que le quiero contar al personal de a bordo o a la que está sentada a lado mío”, comentó a EL UNIVERSAL, en un mensaje enviado desde el aire.
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“Me parece un honor poder recibir este premio al lado de tan increíbles mujeres y actrices de está maravillosa película comandada por este señor director (Jacques Audiard), en un festival de tal envergadura”, abundó.
En la cinta que se desarrolla principalmente en México, Adriana interpreta a Epifania, una mujer que va en busca del personaje central, un narcotraficante, para saber de su marido desaparecido.
“(Su personaje) Encarna también al pueblo de México y Latinoamérica. A la gente de a pie, a los que menos tienen y luchan todos los días por sobrevivir un día más la pobreza, a la violencia, pero que a pesar de eso pueden conservar espacio para la sonrisa”, consideró.
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Siendo un musical, Adriana fue clara:
“Han sido una gozada. Un regalo poder ser dirigida por Jaques, ser parte de este cast de ensueño, ser coacheada en el canto por puro profesional de México, Francia, Venezuela, Juan Pablo Villa, Camille y Clement Ducol, Lucille Chriqui, Caro Santana, Pierre Marie, y todoo el equipo en el estudio Ferber, en el set, Nacho, Sara, Ale, Simón, y tanta gente que no alcanzo a nombrar. Ha sido un proceso a veces agotador, pero siempre enriquecedor. Me llevo amigos para siempre y la experiencia de vivir en París”, expresó.
Desde que se supo del premio, las felicitaciones no pararon. Pero intenta no creerlo demasiado y dar la perspectiva adecuada.
“La vida sigue, es como una bomba de alegría, pero el lunes toca volver a ser mamá , hija y esposa, hacer lunches para la escuela, hacer el súper, buscar quedar en el siguiente proyecto, pagar cuentas”, indicó..
“Pero al mismo tiempo estoy dejándome vivir este sueño inmenso del que creánme, me sigue cayendo el veinte, y me invade la emoción de pronto y se me salen las lágrimas de alegría y le pregunto por mensajes a David, mi esposo, al que muero por llegar a abrazar, a mi madre y a Raúl, mi manager ¿esto está pasando de verdad?, ¡Pellízquenme!”, subrayó.
A su llegada a México fue recibida por amigos que, en su casa, le dieron flores y colocaron un letrero de bienvenida.
“Siempre me agarro de mi familia y mis amigos más cercanos y leales, es importantísimo para mí. Pero bueno, por ahora celebro en grande y me voy a echar unos mezcales, y deseo que esto me abra más puertas, que lleguen más oportunidades así de increíbles y pueda seguir disfrutando esta profesión que tanto amo y que soy tan afortunada de poder ejercer”, concluyó.