La propuesta de ley que esta semana presente la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas persiste en que los exhibidores respeten 10% de tiempo en pantalla para películas nacionales.
Mónica Lozano, quien acaba de tomar la presidencia de la AMACC (por sus siglas), indica que se debe ser cuidadoso en medir los tiempos, que se presentan a las interpretaciones.
“Estamos viendo que se cumpla el porcentaje, que se vea eso”, indica la productora.
La propuesta de una nueva legislatura que englobe el audiovisual e Internet, se entregará a las Cámara de Diputados y Senadores.
En meses recientes la Academia participó en un parlamento abierto convocado por Sergio Mayer, titular de la Comisión de Cultura en la Cámara Baja, con el fin de reformar la actual legislatura que tiene más de 20 años.
Las diferencias se dieron entre productores y exhibidores en el tema de tiempo en pantalla para producciones nacionales.
Mientras algunos creativos solicitaban mayor porcentaje en pantalla, integrantes de la Canacine, que aglutina a exhibidores y distribuidores, señalaba que más cines no repercute necesariamente en asistentes para ellas.
“El ánimo es que el proceso avance”, expresa Lozano.
Guadalupe Ferrer, quien es integrante del Comité de Fiscalización y Vigilancia, apunta que en la ley también se busca que el cine sea reconocido como patrimonio cultural.
“Y garantizar que la Cineteca Nacional tenga en resguardo eso y no sea un DVD o disco”, establece.
La Academia trabaja con especialistas para proponer a la Secretaría de Educación Pública materias curriculares en educación primaria y media superior.
Esto buscaría que profesores introdujeran el lenguaje audiovisual en escuelas y, con ello, la generación de nuevos públicos que podría impactar en el cine nacional.
“Hay un grupo de trabajo viendo desde cómo se da el proceso escolar, es una preocupación para presentarla a la Normal (escuela de maestros) y a la SEP”, indica Ferrer.
El anuncio se dio durante la presentación oficial del Comité Coordinador de la Academia, presidido por la productora Lozano, estando como vicepresidente la escritora Marina Stavenhagen y como secretario, Flavio González Mello.