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“Muchos han demostrado que son un peligro. Donde quiera que estén. No se puede confiar en todos. Son radicales. Dogmáticos. Extremistas. Violentos. Sin hacer un profundo análisis y una cuidadosa investigación sobre su pasado, sería un error dar cobijo a algún ciudadano sirio en nuestro país. Por ahora, no habría razón que lo justifique”.
Fuentes diplomáticas, políticas y académicas consultadas sobre el Proyecto Habesha, mediante el cual se apoyaría a 29 estudiantes de Siria para que vengan a México y permanezcan aquí hasta que “termine” la guerra en su país, coinciden en lo anterior y expresan un rotundo “¡no!”.
Su rechazo no deriva de una actitud xenofóbica o discriminatoria, aclaran. De lo que se trata es de prever. En la misma línea concordante, y en la necesidad de privilegiar el pragmatismo antes que el romanticismo, enumeran algunos de los riesgos que se deben toma en cuenta:
—Tradicionalmente, por su cultura, costumbres y religión, los sirios son inadaptados. Son altamente destructivos, incluso entre ellos mismos. Quieren una realidad de acuerdo a sus creencias, en las que no cabe ninguna expresión de disidencia.
—La absurda convicción en algunos de que sólo ellos están en lo correcto, los lleva a desconocer y a eliminar al otro. Viven peleados entre sí. Asumen radicalmente su fanatismo.
En esas líneas básicas, subrayan, se incuban todos los peligros. Para los sirios mismos. Para los demás ciudadanos del mundo. Lo acabamos de ver en París. Lo hemos contemplado atónitos en otros momentos en distintos lugares. Hoy, más que nunca, podemos ser testigos nuevamente de sus despliegues terroristas en cualquier lado.
¿No son esas razones suficientes para evitar a toda costa que un sirio se asiente en nuestro territorio en cualquier condición? ¿Se pueden atender principios de humanismo en su caso, cuando para ellos, como sociedad, es lo que menos valor tiene?, se preguntan nuestros interlocutores.
Para reafirmar su rechazo a que algún sirio sea acogido en México, refieren la decisión del ex presidente Lázaro Cárdenas de haber concedido refugio a unos 25 mil españoles durante la Guerra Civil, entre 1939 y 1943, en la cual Francisco Franco ahogó en sangre a miles de ciudadanos. La mayoría de ellos vinieron a construir. Ejemplos sobran.
Igualmente, recuerdan la decisión de Luis Echeverría de conceder asilo político a centenares de chilenos cuando, en 1973, Augusto Pinochet encabezó el golpe de Estado contra Salvador Allende.
Aquélla y ésta fueron decisiones de la mayor ética política. Obedecieron al imperativo categórico de defender la integridad, la libertad, la vida.
Por eso, reiteran su oposición al Proyecto Habesha. A su coordinador, Adrián Meléndez. A su impulsor, Francisco Olguín. A la Universidad Panamericana de Aguascalientes. A la Universidad Iberoamericana. Esas organizaciones pagarían unos 11 mil dólares por cada sirio que traigan a México.
Las fuentes consultadas, expertas en el tema, subrayan: “El gobierno puede y debería evitarlo. Está en su derecho y es su deber. Las razones sobran. No puede arriesgarse a la eventualidad de que el día menos esperado haya una sorpresa”.
Aunque es una minoría la que hace pagar a justos por pecadores, no hay lugar para prestarse a actos de buena fe o de buena voluntad mientras prevalezca la incertidumbre y la violencia en Medio Oriente.
Ayer mismo, el Congreso de Estados Unidos endureció los requisitos para la entrada de refugiados sirios en su territorio.
Si se aquilatan los riesgos de lo que se quiere hacer aquí, la respuesta oficial tendría que ser inmediata y contundente.
SOTTO VOCE… Merecido reconocimiento, el que se expresó al presidente Enrique Peña Nieto en las Cumbres del G-20 y de la APEC en Turquía y Filipinas. Por otra parte, cabe resaltar las muestras de solidaridad y apoyo que el Ejecutivo mexicano expresó en sendas ocasiones al presidente Francois Holland por los ataques terroristas en París, lo cual seguramente le reiterará de manera personal en la próxima visita que hará a la Ciudad Luz… Miguel Ángel Osorio Chong y Rosario Robles Berlanga dieron una demostración política inesperada, insólita en Colima. Recorrieron algunos de los puntos más peligrosos, donde se violentan los derechos y la integridad de las mujeres. De manera directa, conocieron los problemas de algunos sectores. Y de manera directa también, les darán respuesta. Además, el titular de la política interna ha girado instrucciones para que esa estrategia se replique en todo el país… Que a propósito de Colima, se prevé que José Ignacio Peralta, candidato del PRI en la elección extraordinaria, gane con toda la maquinaria que comanda Manlio Fabio Beltrones.
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@mariobeteta
