Más Información
PT propone brindar atención médica y educación a menores migrantes no acompañados; buscan asegurar su desarrollo y bienestar
Quinto concierto navideño del Ejército, Fuerza Aérea y Guardia Nacional; hubo temas clásicos y villancicos
Felipe Calderón y Margarita Zavala festejan Navidad con sus hijos; “les mandamos nuestros mejores deseos”, expresan
Adriana Malvido invita a unirse al nuevo movimiento ambiental ABC/MX; convoca a la juventud para enfrentar la crisis climática
Durante el gobierno de Carlos Salinas de Gortari (1988-1994), Decio de María era parte del equipo negociador del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, en su calidad de funcionario de la Secretaría de Comercio y Fomento Industrial. Veintiún años después de que se firmara aquel tratado (1 de enero de 1994), este economista egresado del ITAM fue nombrado presidente de la Federación Mexicana de Futbol, la polémica Femexfut, el pasado 1 de agosto. De ésta renunció Justino Compeán, en medio de las investigaciones por corrupción que realiza la Oficina Federal de Investigación (FBI, por su sigla en inglés) a la industria del futbol que representa la FIFA y sus organismos afiliados, como la Concacaf, a la cual pertenecen Estados Unidos y México.
El expediente abierto por la FBI obedece a que habría sido utilizado el territorio estadounidense para cometer actos de sobornos y chantajes para la designación de los países en donde se desarrollarían las copas mundiales de futbol por parte de la FIFA, así como el arreglo de partidos y pagos irregulares a directivos de federaciones de futbol y entrenadores. Habría sido la banca estadounidense en donde se realizaron las transferencias para los sobornos, situación que preocupa al Departamento de Justicia de ese país.
Por eso llamó la atención de la prensa deportiva y hasta de la política la salida de Compeán de la Femexfut, bajo el argumento de “motivos personales”, pues se sabe que las investigaciones de la FBI alcanzan a la Concacaf y a varios ex directivos y entrenadores del futbol mexicano, así como a integrantes de la Selección Nacional.
Esta investigación policial iniciada en Estados Unidos y que ha motivado la renuncia y algunas detenciones de representantes de la industria del futbol mundial —como su presidente Joseph Blatter que dejó la dirigencia de la FIFA, y en el caso mexicano la renuncia de Justino Compeán— representa una buena oportunidad para que Decio de María limpie algo de la corrupción y abusos que hay en el futbol mexicano.
Por ejemplo, algunos de los directivos que son investigados supuestamente por amañar aquel partido entre las selecciones de México y Trinidad y Tobago para calificar a la Copa del Mundo de Alemania 2006, aún siguen activos en selecciones nacionales de diferentes categorías en el futbol.
Según fuentes vinculadas a este deporte, entre los directivos y exdirigentes de la Femexfut que están en las listas de la FBI para investigación son Alberto de la Torre, Justino Compeán, Gonzalo Fernández, Guillermo Cañedo, Ricardo Lavolpe, Héctor González Iñárritu (actual director de Selecciones Nacionales), Dennis Te Klosse (coordinador general de Selecciones Nacionales Menores) y Jesús Ramírez.
De acuerdo con un testigo protegido de la FBI, la firma de algunos jugadores para las distintas selecciones y equipos del futbol mexicano se ha convertido en un negocio muy rentable de varios directivos, quienes habrían corrompido a jóvenes jugadores de selecciones menores al cobrarles por hacerles pruebas y después alinearlos en los partidos. Aquellos que se han negado a pagar sobornos, simplemente quedan fuera de los equipos.
En el negocio participan los llamados representantes, quienes integran junto con directivos y entrenadores una red de manipulación de jugadores. Estos últimos son obligados a pagar parte de sus salarios para poder ser contratados. Situación que debe ser investigada por Decio de María antes de que la FBI empiece a sacar conclusiones.
PUNTOS SUSPENSIVOS... Un Tuca por un Piojo. Poco avanza el futbol cuando algunos entrenadores, y también sorpresivamente algunos futbolistas, creen que los técnicos tiene el derecho de insultar, humillar, ofender y amedrentar a los jóvenes futbolistas para “motivarlos” y que “jueguen mejor”. Es el caso del nuevo entrenador de la Selección Nacional, Ricardo Ferreti, quien en los entrenamientos acostumbra a mentarle la madre a los jugadores y calificarlos de pendejos, idiotas y estúpidos cuando cometen algún error o simplemente no hacen lo que él ordena. Pero esto parece no importarle a la Femexfut, en donde los derechos humanos y laborales de los futbolistas están ausentes.
oficiodepapel@yahoo.com.mx