Cada año, en los últimos tres, ha sido el más cálido registrado; el desprendimiento del iceberg más grande registrado de la península de la Antártida (5 mil 800 km2, equivalente a cuatro veces la Ciudad de México) y la cancelación de múltiples vuelos este verano en Arizona y Nevada por las altas temperaturas en esos estados, son ejemplos del preocupante cambio climático.
Algunos expertos señalan que se tienen tres años para salvar al planeta de una destrucción irreversible.
Los efectos desbastadores del cambio climático solían pensarse en un futuro muy lejano; sin embargo, la Tierra ya está experimentado efectos severos.
Así, de acuerdo con el World Economic Forum y Business Insider, el nivel del mar se ha incrementado en 50% en los últimos 20 años, y en 2017 las temperaturas han alcanzado máximos históricos desde California a Vietnam, en consecuencia, el deshielo bate récords y se estima que el nivel del mar crecerá cerca de un metro a finales del siglo XXI y varias ciudades quedarían, así, sumergidas en el agua.
Por otro lado, a los aviones no se les permite volar a temperaturas de 120 grados Fahrenheit (49 grados Celsius) porque son menos aerodinámicos, en virtud que el aire caliente es menos denso que el frío, lo que hace más difícil el despegue dado que las alas producen menos impulso y los motores no funcionan tan bien.
Con temperaturas al alza (3 grados Celsius en los próximos años), es de esperarse más cancelaciones de vuelos o bien que los aviones lleven menos combustible, carga o pasajeros.
Un grupo de científicos, diplomáticos, empresarios y ciudadanos han unido sus voces por una acción decidida en contra de los gases de efecto invernadero.
Estos argumentan que, si las emisiones pudieran reducirse permanentemente en los próximos tres años, podría evitarse que las temperaturas alcanzaran una tendencia al alza irreversible.
Los impactos incluirían una rápida deforestación, inundaciones por mayores niveles del mar y variaciones impredecibles de la temperatura que pudieran dañar la agricultura y afectar la vida en las costas, donde vive la mayoría de la gente.
Su propuesta incluye seis objetivos en 2020:
1.- Incrementar el uso total de energía renovable en 30%.
2.- Prospectar para 2050 la eliminación del uso de energía fósil en ciudades con una inversión anual de 300 mil millones de dólares.
3.- Asegurar que al menos 15% de los autos vendidos sean eléctricos.
4.- Eliminar las emisiones netas derivadas de la deforestación.
5.- Llevar a cabo un plan para reducir las emisiones derivadas de la deforestación a la mitad, antes de 2050.
6.- Alentar a que el sector financiero emita más bonos verdes dirigidos hacia los esfuerzos de mitigación del cambio climático.
Algunos riesgos y consecuencias del cambio climático en sectores estratégicos, que fue adaptado de Stern, se pueden resumir en el cuadro que se presenta más adelante.
Como se observa, las acciones enlistadas son muy importantes para una gestión ambiental responsable.
Adicionalmente, el grupo antes mencionado, insta a las naciones y a los empresarios a cumplir el Acuerdo de París, aun sin contar actualmente con el apoyo del gobierno de Estados Unidos, ya que alegan que la oportunidad que aún se tiene es única e histórica.
Directora del Instituto de Desarrollo Empresarial Anáhuac en la Universidad Anáhuac, México Norte
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