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Veo a Carmen Aristegui un poco antes de su programa de CNN en Español. Hay mucho de qué hablar con ella.
Tras el anuncio, desde marzo, de que pronto regresaría con un nuevo programa noticioso, las cosas se han complicado. Ella misma decidió decirlo tras la nueva disculpa (que a nadie dejó convencido) de Enrique Peña Nieto por la Casa Blanca.
Poco después de que anunció que regresaría al aire, no sólo una sino otras dos demandas se presentaron en su contra: la de Joaquín Vargas, que “descubrió”, 8 meses después de que fuera publicado, que un prólogo firmado por ella lo dañaba moralmente; y una demanda “prima hermana” de la original, en un juzgado federal, pero esta vez radicado en la Ciudad de México.
De esas demandas, de las implicaciones, del proceso que sí analiza la Comisión Interamericana de Derechos Humanos por justicia denegada en el país, hablaremos en otra columna. Hay cosas muy interesantes; otras que llaman a sospecha, por decir lo menos.
¿Cómo será el nuevo programa que planea y que se transmitirá por internet a través de su portal Aristegui Noticias? ¿Cómo se financiará? ¿Cómo lo ha ido construyendo?
Según los datos de julio pasado de Comscore —que mide usuarios únicos en computadoras y móviles, es importante medir estos últimos que son según Cisco, 225 millones de dispositivos en todo el país— es el cuarto portal de noticias más visitado en el país, con 5 millones 809 mil usuarios únicos.
El portal se mantiene con algunos posicionados sobre todo a través de Google Ads: el mismo buscador colocará anuncios de bienes y servicios pertinentes para quienes visitan tu página (recuerde que Google es como el nuevo Gran Hermano y todo lo sabe de nosotros o casi) y paga una pequeña cantidad cuando un visitante entra en la página y da click en el anuncio, sólo así.
Esta sola herramienta de ventas les ha permitido mantener el portal y crecer hasta ya tener un equipo de redactores; la perspectiva de lanzar el programa es, también, de crecimiento.
Ahora tienen nuevas oficinas: ya no están en la calle de Darwin, que quedaba cerca de MVS, sino en Periférico Sur. Cerca de El Financiero Bloomberg. Bromea —o no— que podría ser considerado pronto una suerte de “nueva esquina de la información”.
Ahora, al hacer un programa de noticias matutino, ¿cómo darlo a conocer? Además del portal, ¿a través de cuáles plataformas? Hay varias.
Facebook tiene muchos más visitantes por día (en México 61 millones de usuarios, de los cuales 41 millones revisan su perfil diario) que Youtube, pero el canal de videos, que puede transmitir en vivo, paga una vez llegado a cierto número de visitantes. De acuerdo con cifras oficiales de julio pasado, Youtube ya ha pagado 3 mil millones de dólares en el mundo por derechos de autor a creadores de música, por citar un ejemplo, vía su programa ContentID.
Usarán ambas, queda claro, pero aún hay que analizar cómo.
Hay vblogers (video blogers) que han creado pequeñas empresas gracias a esto en México. Sin embargo la apuesta de Aristegui es diferente: sí requiere más personal para investigación y reporteo y también un mejor equipo de transmisión. El estudio que conoceremos pronto será quizá más chico pero “se verá bien”, promete.
Le preocupa que aunque la transmisión no se cobrará, las personas que quieran verlo sí tendrán que invertir en sus “megas”, es decir, su paquete de datos para escucharla. Por eso la app del sitio —que ya tiene— permitirá escuchar sólo audio (que tendrá menor costo para el usuario) o video para el programa.
Para una periodista que como ella, como muchos, solemos llegar a medios a hacer nuestro trabajo y ya contar con todos los “fierros”, todo ha sido aprendizaje. Ha costado tiempo, asesoría, ha significado una curva de aprendizaje.
Lo que ahora hace Carmen es la creación de un medio independiente propiedad de un periodista. Si bien se ha hecho con más o menos éxito en medios sobre todo impresos, hacerlo en un medio audiovisual con la ex titular del noticiario más escuchado de la mañana será un reto.
Pienso en José Gutiérrez Vivó, que lo intentó a través de www.vivoenvivo.org pero nunca con el mismo éxito que tuvo en Radio Centro. Ahí fue un coctel explosivo de malos manejos de su empresa, Infored, y acusaciones de censura en el sexenio de Felipe Calderón. Otro ejemplo podría ser Pedro Ferriz de Con, quien al pelearse con sus ex socios, los dueños de Grupo Imagen, también hizo Ferriz Live TV. Ahora quiere ser candidato independiente a la Presidencia.
Desde aquí, con cariño, toda la suerte que se merece a Carmen Aristegui.
En lo que resta de este mes escucharemos hablar de los muchos cambios que se aproximan en los medios electrónicos tradicionales de comunicación.
Está el inicio, el 22 de agosto, del nuevo noticiero nocturno de Televisa, encabezado por Denise Maerker, y la barra nocturna de programas políticos que tendrá a Joaquín López Dóriga y a Brozo, o la llegada (pospuesta un poco, pero podría salir al aire para fines de mes) de Ciro Gómez Leyva a la nueva cadena de televisión abierta de la familia Vázquez Raña.
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