Fue una pobreza de espectáculo, poco serio, de muy escasa calidad, pero a todo le aplauden, lo celebran como si fuera una fiesta.

Que el mismo día se presenten Guadalajara, América y la Selección Nacional en Estados Unidos genera más de 15 millones de dólares entre la venta de boletos, esquilmos y mercancía oficial. No es ningún secreto lo que el futbol mexicano es para el público en ese país. Los paisanos dejan lo que sea para sentir, aunque sea por un día, algo de lo que dejaron.

Casi 100 mil aficionados entre las asistencias en el Alamodome de San Antonio y el StubHub Center de Carson, que generaron una derrama impresionante de dólares. Esto debería llevar a pensar a los equipos de la Liga MX a explorar en serio ese mercado, no sólo con una embarrada de ilusión para los fanáticos.

¿Por qué no jugar un partido de cada jornada en Estados Unidos? Si se atrevieron a hacerlo la NFL, NBA, MLB con juegos de temporada regular en Londres, Tokio, Sidney y Ciudad de México, debería intentarlo la Liga MX, que tiene un mercado real, el cual puede seguir detonando en éxitos económicos que ayudarían a los equipos de Primera División. Uno por jornada, que cada club ceda un partido como local en una sede donde los mexicanos estén presentes.

Ya durante más de 15 días en Estados Unidos por la cobertura de la Copa Oro, he podido platicar de futbol con muchas personas de este país. La mayoría coincide que gracias al futbol mexicano, este deporte se ha vuelto tan popular acá. Si los equipos no quisieran hacer un partido de temporada regular, entonces MLS y Liga MX deberían buscar seriamente unirse, no solamente en una copa sin importancia como la que viene, sino con un torneo serio que involucre seguir desarrollando la pasión y la rivalidad entre equipos de EU y México.

¿Pueden organizar un Mundial juntos? Entonces pueden hacer la Copa México-Estados Unidos. Sería muy simple y exitosa económicamente. Mucho más atractivo ver al Galaxy vs. Chivas que un Correcaminos vs. Venados de la Copa MX. Se involucrarían más los aficionados, patrocinadores, y crecería la pasión entre dos países antagonistas en el futbol.

Buscar fórmulas novedosas, que entreguen al aficionado algo distinto, a los clubes más dinero, y sin rasgarnos las vestiduras, porque seguramente habrá quien piense que jugar algún partido de la Liga MX en Estados Unidos es perder soberanía. Exageraciones existirán siempre, pero cuando se viera el estado de cuenta de la máquina registradora de cada partido en Estados Unidos, se abrirían los ojos de hasta el más conservador directivo.

Por eso se hace la Copa Oro cada dos años, también por esa razón, la Selección juega cinco partidos al año en EU.

@gvlo2008gerardo.velazquez@eluniversalbgwire.com.mx

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