La Selección Nacional ganó merecidamente a Estados Unidos el viernes pasado en Columbus. El marcador de 1-2 se quedó corto, porque el equipo dirigido por el colombiano Juan Carlos Osorio generó más oportunidades de gol, muy claras, especialmente en el primer tiempo, lapso en el que fue dominador absoluto.
México jugó sin complejos, fue dominante la mayor parte del encuentro, tuvo posesión del esférico y el pase fue su mejor argumento para construir sus ofensivas, con claridad y diversidad. Los jugadores mexicanos comprobaron su indiscutible calidad, estuvieron aplicados tácticamente, concentrados la mayor parte del juego y disiparon todas las dudas en cuanto a la superioridad sobre los estadounidenses.
Mostraron seguridad, consistencia en su juego y sólida mentalidad y dejaron muy claro que para ellos, el miedo es sólo una palabra de cinco letras, para obtener este histórico resultado, pues el Tri no le ganaba a Estados Unidos como visitante un partido eliminatorio desde el 10 de septiembre de 1972, 2-1 con goles de Sergio Ceballos y Juan Manuel Borbolla y con el ingeniero Javier de la Torre como entrenador.
Además, México le cortó al equipo de las Barras y las Estrellas una racha de 30 partidos consecutivos sin perder, como local en eliminatoria mundialista.
Por supuesto que mucho mérito tiene en este triunfo el técnico Osorio, en la elección de los jugadores, en la alineación, en la estrategia y en todas las decisiones que tomó en torno del partido. Cumplió cabalmente con la obligación y reto de hacer jugar bien a la Selección y los jugadores ejecutaron de manera eficiente y por momentos brillante lo planeado.
La eliminatoria ha comenzado y esta categórica victoria es un golpe de autoridad en el camino hacia Rusia 2018. Es sólo el principio y queda mucho por delante, cada partido presentará nuevas exigencias y el ineludible compromiso de jugar bien y avanzar sin sobresaltos, como ha sucedido en los recientes procesos mundialistas.
Esperamos que mañana ante Panamá, el equipo mexicano ofrezca una actuación similar que venga acompañada de otro triunfo. Con “rotaciones” o sin ellas, sólo Juan Carlos lo sabrá, si el Tri es capaz de exhibir el nivel de calidad del viernes pasado, dará nuevas satisfacciones y no vamos a escatimar en elogios para todos. Ellos tienen la palabra.
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***En la foto: Juan Carlos Osorio (JAY LAPRETE. AP)
