He de confesarles, estimados lectores de El Gran Diario de México, que siempre he estado en contra de las distinciones individuales en nuestro querido deporte. Escapa a mi entendimiento que en un juego de conjunto se premie solamente a uno de sus componentes; digo, si no actúa solo. Sin mencionar que el futbol, también conocido como soccer, debe su nombre al vocablo inglés que significa asociación.
Esto viene a cuenta toda vez que durante este fin de semana se estará jugando la décimo séptima y última jornada del Torneo Apertura 2015 del balompié mexicano, en donde estarán en disputa los tres lugares que quedan para la Liguilla. Pero además, varios futbolistas estarán luchando por convertirse en el máximo romperredes de la competencia para ceñirse la corona de “campeón de goleo”.
Quien lleva la delantera es el famoso ‘Tito’ Villa, artillero argentino que lleva 13 dianas y ya saboreó las mieles de ser el máximo romperredes, en el Apertura 2009, cuando defendía a La Máquina Celeste. En aquella ocasión logró el título individual con 17 pepinillos. Hoy podría repetir la hombrada cuando los Gallos Blancos reciban la vista del Puebla, por la noche en La Corregidora de Querétaro.
André-Pierre Gignac (francés), Mauro Boselli (argentino) o Rogelio Funes Mori (argentino) le podrían dar alcance al ‘Tito’; en virtud de que llevan once goles cada uno y Tigres recibe a Cruz Azul, el León juega de local contra los Dorados de Sinaloa y Rayados visita al Toluca. Total, no sería la primera vez que dos, tres o hasta cuatro jugadores queden empatados en la cima de la tabla de goleo individual.
En el quinto lugar aparece Omar Bravo, único mexicano con alguna posibilidad de alcanzarlos. El mochiteco lleva 10 dianas y el Rebaño recibirá al Santos Laguna en el Omnilife, pero echando a volar la sinceridad se antoja una misión imposible. Silvio Romero, de Chiapas; Edwin Cardona, de Monterrey y Dairo Moreno, de Tijuana, también llevan 10 y se encuentran en las mismas que ‘Omarcito’.
Si todo obra en favor de Emanuel Villa, será el segundo futbolista queretano en coronarse; toda vez que, el brasileño Camilo ‘Lobo’ Sanvezzo lo hizo el torneo pasado, con 12 goles, compartiendo honores con Mauro Boselli, del Club León.
Es frecuente que basten 14 o 15 goles para obtener el título individual. Qué lejos se ven aquellos días en que el paraguayo José Saturnino Cardozo, en un torneo corto, logró marcar la friolera de 29 tantos.
En la madre patria, el que mete más goles se hace acreedor al “Pichichi”, nombre que se le da al trofeo en honor a Rafael Moreno, romperredes del Atlético de Bilbao por la década de los 20; sin embargo, no es un reconocimiento oficial (lo otorga un diario deportivo).
En fin, aunque a mí no me convence eso de las distinciones personales en un juego de conjunto, ahí está otro de los atractivos para el cerrojazo de la temporada regular. Digo, los goles son el resultado del trabajo del equipo, todos colaboran… no los meten solos.
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