Le llaman tercera etapa de exhibición al tiempo en que, luego de estrenar en las consideradas ciudades importantes, una película continúa en cartelera y está por abrir en lugares con una buena cantidad de público. Eso es lo que le pasa desde este semana a Desierto, ópera prima de Jonás Cuarón, co escritor de Gravedad, que lleva cerca de 900 mil boletos vendidos en cinco semanas de exhibición. Sus números lo colocaron la semana pasada en el sitio 9 del Top Ten de filmes taquilleros, rebasando a El cazador y La reina de hielo. Jonás prepara ahora una serie de fotografías con leyendas alusivas para entregarlas en las oficinas de Donald Trump, el empresario estadounidense que desea la presidencia del país de las barras y las estrellas.
En el cine todo es lento, incluso la entrega de premios. Isaac Ezban acaba de recibir el galardón como Mejor director del Puerto Rico Horror Film Fest, que ganó en octubre pasado. “Por problemas de aduana hasta hoy pudo llegar, al parecer fue toda una misión”, destaca el realizador de El incidente. El galardón es un cuervo sobre una calavera. El cineasta espera el lanzamiento en cines de Los parecidos y está por arrancar el rodaje de un corto que será integrado en el proyecto Aztech: las profecías, de ciencia ficción.
Grata impresión ha generado el corto documental El buzo en el festival de cine de Durango. Con duración apenas superior a los 15 minutos, la historia dirigida por Esteban Arrangoiz sigue a Julio César Cú, quien tiene a su cargo la tarea de bucear en el drenaje de la Ciudad de México, ayudando a disminuir el riesgo de inundaciones de calles al retirar objetos de basura. El cortometraje forma parte ahora de la plataforma digital Filmin Latino, impulsada por el Instituto Mexicano de Cinematografía.
Expectación tiene el público por La casa más grande del mundo, de Ana V. Bojórquez y Lucía Carreras, película de ficción en donde una niña guatemalteca pierde las ovejas que pastorea y debe encontrarlas antes de caer la tarde. La cinta fue aplaudida en el festival de cine de Morelia 2015 y ahora le toca a los duranguenses disfrutarla.
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