Nuevamente el 5 de mayo tenemos la oportunidad de salir airosos de una lucha, ahora, contra uno de los males más perniciosos de toda la historia: la opacidad respecto del acceso a la información pública. A diferencia de esa histórica batalla de Puebla, nuestra defensa son ahora las leyes en materia de transparencia, la sociedad organizada, la ciudadanía así como las instituciones; juntos, tenemos la opción, no de sólo retrasar al enemigo, sino de forzar su retirada. Este 2016, habrá por seguro un antes y un después del 5 de mayo.
Hoy el Inai se ocupa sólo del ámbito federal, carece de ciertas facultades para asegurar el ejercicio de los derechos que tutela a todos los mexicanos y no cuenta con un sistema que permita tener “toda la información del país en un solo lugar”. A partir de esa fecha simbólica todo cambiará, en favor de nuestros derechos.
Será a partir del próximo jueves, por ejemplo, que el Inai podrá ejercer su facultad de atracción y revisión de casos presentados ante los órganos garantes locales, lo cual favorecerá al ciudadano que juzgue que su derecho de acceso o de protección de datos personales no está siendo respetado, así como la homologación de criterios de resolución.
Otro: existirá la Plataforma Nacional de Transparencia, una solución tecnológica que agrupará en una sola herramienta cuatro grandes sistemas por ahora independientes: el de solicitudes de información, la gestión de medios de impugnación, los portales de obligaciones de transparencia y de comunicación entre órganos garantes y sujetos obligados.
Es una verdad afortunada que no partamos de cero en esta batalla: las experiencias y los conocimientos acumulados nos permiten mirar al enemigo directo a los ojos y retarlo ahora con estas funciones extendidas y el fortalecimiento del derecho ciudadano a saber. El tiempo comprendido desde la publicación de la Ley General de Transparencia y Acceso a la Información Pública hasta hoy ha representado la suma de convenios, de acuerdos políticos y legislativos, de diálogo social, de creación de soluciones, de sensibilización, de capacitación y, en un amplio sentido, de preparación para lo que viene después del 5 de mayo.
Entre todos esos esfuerzos estuvo el impulso a la armonización de las leyes locales a la Ley General. Al respecto solicitamos atención de las partes involucradas, realizamos sendos estudios y diagnósticos, firmamos acuerdos inéditos en la vida política nacional, expusimos en diversos foros y formatos la urgencia de cumplir en tiempo con este ejercicio de federalismo. Sin embargo, al día de hoy la meta de lograr la armonización de las 32 normativas locales parece poco probable. Son 12 los estados con leyes armonizadas (Baja California, Coahuila, Chihuahua, Jalisco, Morelos, Oaxaca, Querétaro, Quintana Roo, Sonora, Tabasco, Tamaulipas y Yucatán); el resto de las entidades enfrenta realidades que hasta ahora les han impedido lograr la tarea.
Así que la armonización permanece como un reto en manos de los Ejecutivos o Legislativos locales con la finalidad de poder establecer un piso parejo para todos los mexicanos en materia de derecho de acceso a la información. Si no se establece la igualdad de condiciones en el ejercicio del derecho para los mexicanos, pasado el 5 de mayo, en apego a sus funciones y atribuciones constitucionales, el Inai se plantearía tomar medidas legales para evidenciar las omisiones de las entidades federativas correspondientes en el proceso de armonización legislativa.
A pesar del posible retraso, a partir del 5 de mayo se confirmará que el cambio de siglas institucionales no se trató de un asunto cosmético, sino de uno de gran escala que permitirá dar pasos firmes en la garantía de los derechos fundamentales, es decir a nivel supranacional, actuando como Inai en lo nacional y dejando la encomiable tarea del ámbito subnacional en los órganos garantes estatales.
En el Inai y en el Sistema Nacional de Transparencia estamos decididos a enfrentar las resistencias que se presenten en contra del acceso a la información pública; será a través de la aplicación de la ley, de programas de trabajo orientados a resultados, y cumpliendo cabalmente las funciones encomendadas como buscaremos que la ciudadanía, por medio del acceso a la información, logre recuperar la confianza en sus instituciones y mejorar su calidad de vida. En materia de transparencia, habrá un antes y un después luego de este 5 de mayo.
Comisionada presidente del Inai.
@XimenaPuente