Sostengo que las democracias rinden mejores resultados cuando los ciudadanos participan en la elección de sus representantes de manera informada. Sin duda alguna, la reforma constitucional en la materia y la aprobación de la Ley General de Transparencia han contribuido a avanzar en dicha dirección; sin embargo, para asegurar que esta tendencia continúe y se fortalezca, el Inai ha impulsado la firma de un Acuerdo Nacional por la Transparencia con los partidos políticos para promover el compromiso público de estos organismos con la rendición de cuentas. Acuerdo que, espero, pueda servir como punto de partida para impulsar un nuevo equilibrio en nuestro sistema democrático.
Con este pacto buscamos respaldar la voluntad política de los partidos de transparentar el uso de los recursos públicos que les son otorgados, y así propiciar el debido cumplimiento de las 78 obligaciones de transparencia, 48 generales y 30 específicas, que deberán cumplir a partir del 5 de mayo de este año, atendiendo nueve principios: veracidad, confiabilidad, oportunidad, congruencias, integralidad, actualización, accesibilidad, comprensibilidad y verificabilidad.
Un punto relevante al respecto es que, de acuerdo con lo establecido en el marco normativo vigente, la información derivada de estas obligaciones deberá ser pública y puesta a disposición de la ciudadanía tanto en sus correspondientes portales de transparencia como en la Plataforma Nacional de Transparencia. Este hecho permitirá que la sociedad cuente con más y mejor información para ponderar el desempeño de los diversos institutos políticos y contribuir con ello a determinar el sentido de su voto en las urnas. Además, abonará a combatir la opacidad que tradicionalmente se ha registrado sobre la manera en que los partidos políticos hacen uso de los recursos públicos que les son asignados para el cumplimiento de sus funciones.
Lo anterior sin olvidar que en medio de la fuerte crisis de credibilidad que atraviesan los partidos políticos, la transparencia representa una oportunidad como pocas para restablecer su vínculo y legitimidad ante la sociedad.
Los partidos políticos se deben a la ciudadanía, surgen de ella y ella es la que los legitima. En este sentido, su compromiso con la transparencia no sólo será prioritario para reconectar con las y los mexicanos, sino fundamental para impulsar la reconstrucción del tejido social y la consolidación de nuestra democracia.
Sobre todo considerando que, actualmente, México ocupa el lugar 66 de 167 países, en el Democracy Index 2015 que publica The Economist Intelligence Unit, lejos del grupo de países con democracia total.
Sin duda alguna, el camino será largo. La firma de este acuerdo por la transparencia con los partidos políticos es tan sólo un primer paso. Sin embargo, en los años venideros, requeriremos el esfuerzo coordinado de todos para enfrentar la contracorriente que significa que sólo 17% de la población se sienta representado por el Congreso y el que únicamente 26% considere que existe mucha o algo de transparencia en el gobierno.
Hasta ahora son Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) y Movimiento Ciudadano los que han suscrito el Acuerdo. Muy pronto veremos el compromiso de las demás fuerzas políticas nacionales.
Nos encontramos ante una gran oportunidad para combatir la ausencia de valores que enganchen a la ciudadanía con los partidos políticos y las instituciones. Es tiempo de enfrentar la insatisfacción de nuestra democracia con la voluntad política que conduzca a hacer de la transparencia y el acceso a la información, reglas inviolables.
Comisionada presidente del Inai.
@XimenaPuente