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“Qué hilo tan fino, qué delgado junco/ —de acero fiel— nos une y nos separa/ con España presente en el recuerdo/ con México presente en la esperanza”. Estos versos los escribiría el poeta salmantino Pedro Garfias a bordo del buque francés Sinaia camino al exilio, en aquella primera oleada de españoles que huían de los campos de concentración de Franco; 307 familias, las primeras mil 559 personas de las 25 mil —estimadas— que llegaron a nuestro país de 1939 y hasta 1942.
En el marco del 75 aniversario de la llegada a México de los refugiados de la guerra civil española, se presentó el pasado 5 de noviembre en el Centro Cultural España (CCEMx), una aplicación web resultado de un año de trabajo en torno a ese acontecimiento que marcaría, entre otras cosas, la vida cultural mexicana. El “Mapa colaborativo del exilio español en México” es un proyecto que ha conseguido, hasta ahora, mapear 108 ubicaciones —la mayoría en nuestro país—; los colaboradores han logrado reunir 36 entrevistas, audios, textos y unas 200 imágenes que juntas forman una bien definida cartografía de la vida de los republicanos españoles que se vieron obligados a huir y que ayudaron a construir instituciones tan importantes como el Colegio de México y el Fondo de Cultura Económica, y otras incontables aportaciones al arte, la educación y la ciencia nacionales.
El “Mapa colaborativo del exilio español en México” —que puede consultarse en http://www.exiliomexico.escoitar.org/— es una iniciativa coordinada por CCEMX a la que se han ido sumando colaboradores importantes, como la Oficina Cultural Embajada de España, el Colegio Madrid, el Instituto Luis Vives, la Asociación de Descendientes del Exilio Español A.C., el Centro de Investigaciones de América Latina y de Caribe de la UNAM y que está patrocinado por una decena de empresas e instituciones interesadas en recuperar y conservar esas historias para las nuevas generaciones. Este mapa interactivo busca, a través de recorridos históricos, resignificar espacios como el Edificio Ermita, el Café do Brasil, el Café La Habana o el Mercado de San Juan; y quizá sensibilizar, a través de una mirada a la vida de estas personas, a un sector de la sociedad española que se resiste todavía a darle el justo valor a aquella decisión del presidente Cárdenas de abrir las puestas a los republicanos que quisieran establecerse en este lado del Atlántico.
La aplicación está diseñada para poder ser explorada con facilidad en dispositivos móviles, y al hacer uso de recursos como el GPS permite a los interesados recorrer en tiempo real los puntos más importantes del exilio español en la ciudad, se han organizado incluso “Bici rutas de la memoria” en el centro histórico para este fin.
El exilio español en México ha trascendido a la tragedia y es desde hace muchos años motivo de celebración; es cierto que lo primero, la tragedia de la expatriación, no puede minimizarse, pero lo que ha resultado para los que llegaron y para los que “ya estábamos aquí” no puede menos que festejarse, como concluye con cierta gracia Garfias en ese mismo poema: “Pero eres tú esta vez quien nos conquistas,/ y para siempre, ¡oh vieja y nueva España!”.
@Lacevos
