Para hacer efectivo el derecho a la educación no basta acudir a la escuela y permanecer en las aulas; es fundamental que ese aprendizaje se consolide en logros, como lo ha señalado el representante en México del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), Christian Skoog.

Hoy el contexto internacional coloca a México en una posición inmejorable para aprovechar el potencial y capacidades de la enseñanza y formación técnica profesional de nuestros jóvenes, a través de la Educación Dual.

Concebido como un sistema educativo que combina la formación y experiencia profesional con el aprendizaje, la educación dual ha sido adoptada por países europeos como Alemania, Austria, Croacia, Suiza, Dinamarca, Países Bajos; así como en Colombia, Ecuador, Chile, Perú y Costa Rica.

En México este sistema se adoptó en 2013 por la SEP a través de la Subsecretaría de Educación Media Superior (SEMS) y el Colegio Nacional de Educación Profesional Técnica (Conalep), en coordinación con la Coparmex, con la asesoría de la Cámara México-Alemana de Comercio e Industria, como una estrategia para acercar la formación educativa a los puestos de trabajo.

El novedoso formato incorpora a los estudiantes a una empresa a partir del tercer semestre, con base en un plan de formación individualizado, con lo que alternadamente acuden a la escuela y al lugar de trabajo durante periodos que pueden variar de uno a dos años, según el tipo de carrera.

Esa experiencia permite a los alumnos desarrollar en las empresas actividades que corresponden tanto a su carrera como a la rama de la empresa. El resultado es una aplicación inmediata de los conocimientos en la profesión que, en la mayoría de los 4 mil casos de estudiantes que se han formado en 400 empresas, ha elevado la competitividad.

Consolidar la articulación escuela-empresa en nuestros estudiantes de bachillerato tecnológico, profesional técnico o profesional técnico bachiller de las instituciones Públicas de Educación Media Superior conlleva el desafío de potenciar los esquemas de cooperación entre el Estado y los sectores productivos.

Hasta agosto de 2016 participaban en el Modelo Mexicano de Formación Dual 297 empresas, mil 443 estudiantes y 91 planteles educativos de Conalep y Cecytes, en 15 entidades federativas. La meta es que en 2018 sean 10 mil estudiantes quienes se formen en esa modalidad.

Más que un riesgo, el entorno internacional representa una oportunidad para hacer de la educación que combina conocimiento con práctica, una auténtica palanca de desarrollo que brinde a nuestros jóvenes la certeza de un trabajo digno y bien remunerado; eleve la competitividad y sea afrenta hacia la violencia y las amenazas desestabilizadoras.

Secretaria de Educación en el Estado de México.

@AnaLiliaHerrera

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