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Donald Trump será el 45º presidente de la Unión Americana. Aquí algunos puntos que no se consideraron con suficiencia en las encuestas y el impacto del triunfo de Trump en México:
1. El contexto social y los votantes de Trump. Su campaña estuvo marcada por una comunicación disruptiva: criticó el modo de hacer política y aprovechó el descontento de un sector que se siente vulnerable: los votantes blancos de clase media.
Trump manifestó en reiteradas ocasiones que Hillary Clinton representaba el establishment político, y sin quererlo, ella misma ayudó a consolidar esa crítica. El envío de correos públicos desde un servidor privado investigados por el FBI, las contribuciones opacas a la Fundación Clinton y su cercanía con los banqueros de Wall Street, fueron los elementos que el votante consideró para no votar por la candidata demócrata. El tradicional voto republicano se fortaleció por un nuevo votante: personas de mayor edad, blanca, rural, populista y además, muy molesta con la situación económica actual. Trump identificó y aprovechó el miedo de este sector de convertirse en una minoría en su propia nación. Supo capitalizar su descontento con la situación económica, concentrándose en ejemplos concretos como el TLC y a toda empresa que ha migrado a otros países al utilizar por ejemplo el caso de Carrier.
2. Su Plataforma. Cuidando siempre dicho electorado, las propuestas de campaña plasmadas en el documento Contract With The American Voter, Trump se compromete a hacer de Estados Unidos la gran nación que alguna vez fue (Make America Great Again). ¿Cómo? A través de seis medidas encaminadas a terminar con la corrupción y la colusión de intereses en Washington, con fuertes y agresivas propuestas para impedir la reelección indefinida de legisladores y prohibir a quienes salen del gobierno federal y del congreso a participar como cabilderos. Con siete acciones para proteger a los trabajadores norteamericanos, como la renegociación del TLC, el retiro del TPP o cancelar billones de dólares destinados a la ONU para programas de cambio climático; y a través de cinco acciones para restaurar la seguridad y el Estado de derecho, mediante la deportación masiva de migrantes que han cometido delitos o cancelar las visas a aquellos países que no los quieran recibir.
3. Implicaciones para México. A diferencia de anteriores elecciones en Estados Unidos, México jugó un papel protagónico. Las políticas de Trump podrían tener serias repercusiones para nuestro país. La más inmediata será para los connacionales que viven en EU, principalmente aquellos cuya estancia es irregular, pero también toda la minoría hispana que podrá resentir los actos de racismo espontáneos que ya comienzan a observarse. La política exterior mexicana será puesta a prueba. La red consular y la vinculación con organismos multilaterales serán los mejores instrumentos para defender los derechos de los mexicanos que viven en Estados Unidos.
Pero el resto de sus propuestas son las que en realidad pueden afectar seriamente nuestra economía. De renegociarse el TLCAN, se puede desalentar la inversión en nuestro país y desactivar las exportaciones que resultan un motor de nuestra economía y sobre todo una importante fuente de empleos. Y qué decir de las remesas que pretenden utilizarse para la eventual construcción de un muro. Lo que estará a prueba entonces, será la capacidad y creatividad no sólo del gobierno sino de todos: gobiernos, congreso, empresarios y ciudadanos, unidos frente al reto que tendremos que enfrentar desde nuestra trinchera.
A bote pronto. Fue el único que vio en un riesgo una oportunidad. Con costos muy altos, pero el tiempo le dio la razón.
Especialista en comunicación, gestión de gobierno, campañas políticas y opinión pública
