Con la incursión de Samuel García como precandidato único de Movimiento Ciudadano (MC), la boleta presidencial ha quedado prácticamente definida. Esta es la primera encuesta que realizamos con lo que al parecer es la conformación definitiva de la contienda.
La encuesta nacional en vivienda de Buendía & Márquez para EL UNIVERSAL arroja que Claudia Sheinbaum inicia el periodo de precampañas con una amplia ventaja. Casi la mitad de los entrevistados (48%) manifiesta que si hoy fuera la elección votaría por la exjefa de Gobierno. Su principal rival, Xóchitl Gálvez, obtiene 24% mientras que García Sepúlveda inicia la carrera presidencial con apoyo de un dígito (8%). La No Respuesta a la pregunta de intención de voto fue de 20%.
Sheinbaum Pardo mantiene la delantera en cuanto a reconocimiento de imagen y nombre. Dos de cada tres entrevistados reconoce su rostro y una cifra mayor su nombre. El reconocimiento visual de Gálvez Ruiz es de 37%, y 55% conoce su nombre. El reconocimiento de nombre de García Sepúlveda es de 39%.
Más importante que el reconocimiento de nombre es la opinión que los ciudadanos tienen de los aspirantes. Sheinbaum Pardo lidera este indicador. Su balance de opinión es de +39 (positivos menos negativos), mientras que Gálvez Ruiz tiene más negativos que positivos (balance de -3). García Sepúlveda presenta un balance positivo (+11) pese a ubicarse en último lugar de la intención de voto. Si el gobernador mantiene este balance es posible que su posicionamiento mejore conforme su reconocimiento aumente.
El principal reto de la candidata de la coalición PAN-PRI-PRD es darse a conocer de manera positiva. Hasta ahora no lo ha conseguido: de junio a la fecha sus valoraciones positivas aumentaron 11 puntos pero sus negativos lo hicieron en 9. Otro dato es que 12% de los entrevistados reportó escuchar alguna noticia positiva sobre Gálvez Ruiz en las últimas dos semanas, pero 13% escuchó alguna noticia negativa. Los entrevistados reportaron haber escuchado información predominantemente positiva sobre Sheinbaum Pardo o García Sepúlveda.
¿Qué dinámica en la opinión pública podemos esperar en los próximos meses? Para responder esta pregunta realizamos una tipología de votantes a partir un análisis de segmentación. De acuerdo con el ejercicio se pueden distinguir seis tipos de electores según sus preferencias partidistas y la imagen que tienen de los candidatos: 1) “Frentistas”, que apoyan mayoritariamente a Xóchitl Gálvez y representan 10% de la población; 2) “Opositores desinformados” (18%) que también votarían por Gálvez pero en este momento lo hacen porque se identifican con el PAN, PRI o PRD (desconocen quiénes son los precandidatos y de hecho, 76% no reconoce a Xóchitl Gálvez); 3) “Morenistas”, que representan 22% de los entrevistados; 4) “Morenistas desinformados”, el segmento de mayor tamaño (31%) compuesto por ciudadanos que votarían por Sheinbaum y tienen buena opinión de ella, pero desconocen quiénes son los demás contendientes; 5) “Apáticos” (7%), apartidistas que tienen poco interés en informarse sobre los partidos y candidatos; 6) “Antisistema” (13%), ciudadanos apartidistas que tienen una opinión predominantemente negativa de los partidos y sus aspirantes y que, en el mejor de los casos, no los conocen. Los últimos dos segmentos son quienes tienen menor probabilidad de acudir a las urnas el próximo 2 de junio.
La ventana de oportunidad para los aspirantes está en la población desinformada. Son el segmento en el que más pueden influir las campañas. El reto es darse a conocer en ese público. En el grupo de los “opositores desinformados” que apoya más a Xóchitl hay una mayor proporción de jóvenes y habitantes del noreste del país (segunda circunscripción) que en los demás segmentos. Estos son los sectores a los que Samuel García ha dado prioridad.