Luego del segundo debate entre candidatos presidenciales, articulistas y columnistas de EL UNIVERSAL destacaron la mejoría de Xóchitl Gálvez, candidata de la alianza opositora, y la seguridad y dominio de temas de la candidata oficialista Claudia Sheinbaum.
Mencionaron además que Sheinbaum llegó al debate con la consigna de defender todo lo que se ha hecho en este sexenio a nivel federal y Gálvez con el objetivo de ser incisiva y atacar.
A continuación, las respuestas de los colaboradores de esta casa editorial a las preguntas: 1. ¿Quién ganó el segundo debate y por qué? 2. ¿Cuál fue la mejor propuesta?
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ALBERTO AZIZ NASSIF
El segundo debate repitió algunos de los problemas del formato del primer debate, tres temas muy amplios y tiempos muy acotados. Vimos un doble nivel otra vez, la polémica entre Claudia y Xóchitl (“narcocandidata”, “la corrupta del Prian”, “candidata de las mentiras”) y, por otra parte, Máynez. Claudia estuvo segura y tranquila, dominó en los temas a pesar de que manipuló datos sobre crecimiento económico; ahora presumió más a las 4T. Xóchitl se vio muy agresiva, insistió en ataques y los repitió, pero no logró generar una mejor imagen. En suma, ganó Claudia porque mantuvo su ventaja.
Las mejores propuestas en materia de medio ambiente y cambio climático las hizo Claudia, es su materia. Xóchitl hizo buenas propuestas sobre los pueblos indígenas. La estrategia de Máynez fue resaltar a Nuevo León y Jalisco como buenos gobiernos. Hubo un exceso de propuestas, fue muy largo el tiempo, casi dos horas. De nuevo, no parece que se vayan a mover las tendencias. Veamos qué pasa en el posdebate.
LEONARDO CURZIO
El debate lo ganó Xóchitl Gálvez. Se le vio más segura, fue muy incisiva y directamente sacó el hacha.
La propuesta más interesante es convertir el IEPS en un impuesto ecológico y la formuló Álvarez Máynez.
SOLANGE MÁRQUEZ
Creo que este debate lo ganó Xóchitl Gálvez. Hubo mucha fluidez en su mensaje, logró enviar mensajes importantes a la ciudadanía sobre los temas que realmente les preocupan, se mantuvo firme y segura al presentar propuestas específicas. Respondió a los ataques, pero también atacó y logró posicionar mensajes que seguramente estaremos viendo en redes sociales próximamente. Contrastando con una Claudia Sheinbaum que, en esta ocasión, parecía llegar con la consigna de defender todo lo que se ha hecho en el sexenio actual a nivel de gobierno federal.
Las propuestas se presentaron de manera más bien general, sin embargo, me quedo con la propuesta de Xóchitl Gálvez de hacer que “sus obras faraónicas” sean el mantenimiento de escuelas y hospitales, construir caminos e invertir en infraestructura que afecta directamente la vida de la gente. Merece una mención también el que haya puesto sobre la mesa las necesidades del campo y la extorsión que viven hoy los productores, acosados por el crimen organizado y que afectan tanto la producción, cosecha como precios de venta. La inversión en proyectos y programas sociales es finalmente, algo que no nació con el gobierno actual.
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MAURICIO MERINO
Perdió Xóchitl Gálvez, porque no respondió las preguntas y no logró presentar una visión articulada del país que propone. Optó por golpear y descarrilar a la puntera de las encuestas, sin éxito. De su parte, Claudia Sheinbaum cumplió su cometido: hablar bien del gobierno de López Obrador y presentarse como la heredera de ese proyecto.
Jorge Álvarez Máynez fue el que mejores, más claras y más coherentes propuestas hizo a lo largo del debate. Lo vi mucho mejor ahora y tengo para mí que volverá a crecer. Esta vez se le vio presidenciable y más apegado a la ideología socialdemócrata que defiende su partido. Empero, dudo que le arrebate votos a Claudia Sheinbaum.
AMADOR NARCIA
Mejoró mucho Xóchitl, con más ataques que propuestas, pero NO noqueó. Sheinbaum, imperturbable. Robóticamente precisa en su discurso.
El esquirol naranja, desechable.
Lo mejor, “La candidata de las mentiras”, “Narco candidata” y “La corrupta”.
En general, las propuestas fantasiosas y electoreras. Debate, a-bu-rri-dí-si-mo.
Falló producción y organización, con amenaza de portazo.
EUNICE RENDÓN
Ganó Claudia porque es la más articulada, domina los temas y presentó buenas propuestas.
Fue notorio que esta vez ganó el encargo de destacar los logros del presidente actual.
Es inmune a las críticas, casi con desinterés desestimó cualquier alusión a su gobierno o el de su partido.
Xóchitl mejoró respecto del debate anterior, pero sigue faltándole capacidad para atacar las debilidades de la candidata oficialista.
Máynez cada vez más respetuoso y alineado con Morena, dirigió sus críticas solamente a la candidata del PRI/PAN/PRD.
Los insultos entre las dos candidatas mujeres, lo peor del debate.
Un debate en el que los candidatos puedan decir lo que quieran, sin sustentar ni comprobar lo que dicen o lo que proponen, es un ejercicio estéril.
La estrategia de los candidatos sigue centrándose en denostar a sus oponentes y no en construir propuestas.
La propuesta que más me gustó, pero que faltan detalles para que sea viable, sin sobrecostos y con proyecto de impacto ambiental, es la reactivación de los trenes de pasajeros en México a lo largo de 18 mil kilómetros, propuesta por Claudia Sheinbaum.
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RAÚL RODRÍGUEZ CORTÉS
El desarrollo del debate obliga a hablar primero de un perdedor, y ese es el ciudadano común. No hubo nada nuevo bajo el sol. Fue lo mismo que el debate anterior. Xóchitl se afanó en atacar, llamó a Sheinbaum candidata de las mentiras, volvió a la Línea 12, al Rébsamen, a los hijos de AMLO y el tren maya. Claudia la ignoró y se dedicó a referir algunos planes de gobierno. Acaso el golpe más fuerte asestado por Xóchitl fue el del agua contaminada, pero ni ese ni ningún otro fue el esperado gancho al hígado o el upper cut que la noqueara. En ese sentido Xóchitl volvió a perder, aunque ni Claudia ni Máynez consiguieron destacar.
PAOLA ROJAS
Claudia Sheinbaum dedicó más tiempo a defender a la actual administración y a enlistar los logros de la llamada cuarta transformación, que a hablar de lo que serán sus propuestas. El formato más flexible de este debate, no le permitió esquivar los cuestionamientos con la fortuna del encuentro anterior.
Xóchitl Gálvez parecía nerviosa al inicio y no siempre acertó a ver a la cámara. Pero ya avanzado el debate, se mostró segura, hizo buenas propuestas y reaccionó asertivamente a los ataques. Al decir que ella se manda sola y no sigue las órdenes de ningún hombre, puso a Sheinbaum en una posición incómoda.
Jorge Álvarez Máynez supo hablarles a los jóvenes, segmento de la población en el que ha centrado su campaña en medios digitales con éxito. Fue dinámico y veloz. Pudo plantear más ideas y propuestas, en menos tiempo.
ANTONIO ROSAS LANDA
Ganaron Morena y Máynez por echarle montón a Gálvez. Claudia para consolidar su ventaja y Movimiento Ciudadano obedeciendo a un cálculo político que solo podría arrebatar votos a la oposición. Lamentable espectáculo.
Ninguna, todos los candidatos ofrecen programas que ignoran la grave situación fiscal que deja esta administración al país. Fue la feria de las ideas sin fundamento y sin responsabilidad.
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ALFONSO ZÁRATE
Xóchitl segura, severa en sus juicios y más incisiva que en el primer debate: califica a Sheinbaum como mentirosa, corrupta, candidata del combustóleo e incluso narco-candidata porque representa, dice, al partido de la muerte. Frente a acusaciones graves, en distintos momentos Claudia se quedó sin palabras.
Claudia inexpresiva, dura también (nunca mira a su competidora), la llama corrupta.
Xóchitl propone un México de clases medias, sin miedo y con paz y sostiene que el principal problema económico es la extorsión y el cobro de piso y anuncia que como presidente castigará a los delincuentes, “se acabaron los abrazos a los delincuentes y vamos a aplicar la ley.”
Claudia se apoya en los logros indiscutibles de este gobierno que aumentó los salarios, aumentó el empleo y fortaleció el mercado interno, pero miente al hablar del crecimiento económico.
¿Se moverá el marcador? Solo incidirá en algunos sectores de los indecisos y creo que será favorable a Xóchitl.
