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El consejero presidente del Instituto Nacional Electoral (INE), Lorenzo Córdova, señaló que la actual polarización en México rebasa ya la tolerancia.
“Aunque la polarización no es nueva, sí estamos viendo un fenómeno renovado. La polarización que hoy estamos viendo (...) está pasándose de lo tolerable”, manifestó el funcionario.
En el marco de su participación en el webinar A tiempo y bien. El amor es ciego, organizado por el Centro de Estudios México-Estados Unidos de la Universidad de California, en San Diego, y la organización Tijuana Innovadora, subrayó que las campañas electorales son el espacio para la confrontación política, pero todo dentro de los cauces institucionales.
Lo que se observa actualmente en México, y con preocupación, expresó, es que esa polarización está siendo aderezada con un peligroso componente que por definición es antidemócrata: la intolerancia.
“Eso está provocando que hoy estemos viendo, con mucha frecuencia, expresiones como: ‘El INE debe morir’, refiriéndose a la institución, o: ‘el INE debe ser exterminado’”, indicó.
Esos tonos discursivos, advirtió Córdova Vianello, recuerdan a aquellos que antecedieron experimentos antidemocráticos y totalitarios del siglo pasado.
“Eso es lo nuevo, y evidentemente aquí hay una estridencia que hay que tener cuidado”, exclamó el consejero.
A pesar de los señalamientos y las descalificaciones, entre otros, añadió, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) recién reveló que el INE es la institución civil con mayor confianza ciudadana, después del Ejército, la Marina y apenas por debajo de la Guardia Nacional (GN).
El consejero presidente del INE subrayó que a pesar de que existen quienes lo quieren ver como “el gran malo”, lo cierto es que él es uno más de los 11 integrantes del Consejo General del órgano electoral.
Manifestó su preocupación sobre la situación que se vive en el país, pues no se puede pensar, expuso, que las conquistas democráticas llegaron para quedarse, ya que se pueden ir de las manos si es que no se cuida y defiende a la democracia en términos institucionales.
“A este INE no lo van a amedrentar con amenazas y vamos a seguir haciendo lo que dice la ley, sin importar quién.
“El INE no es enemigo de nadie, no caigamos, hablando de discursos falsos, en el de querer vender la idea de que está a favor de alguien y en contra de otro más, no es cierto.
“El INE no es la oposición de nadie, no está a favor de nadie, es el árbitro y está por encima de la contienda”, exclamó.
Todo ello implica, añadió, que se tenga que vigilar que todos cumplan con la ley y si ésta no gusta, se debe ver otro momento para cambiarla.
“Pero hoy las reglas están pactadas en la ley, fueron demandadas por la oposición de ayer y se construyeron en consenso y hoy hay que aplicarlas”, subrayó.
El organismo electoral de hoy, manifestó, es el mismo de hace tres y seis años, con cuatro consejeros nuevos que fueron nombrados por la Legislatura.
Cuestionado sobre lo que considera que ha cambiado, Córdova Vianello aseveró que el presidente Andrés Manuel López Obrador es un actor político y que actúa como tal.
“Tratando de que su postura prevalezca en las urnas. Hay una duda sobre si puede o no hacer [el Presidente] hacer propaganda. Las reglas las puso la oposición que hoy es gobierno”, indicó el funcionario.
Si se pretende una reforma electoral, agregó Córdova, será necesario una que mejore el sistema que actualmente existe, no una contrarreforma.
El consejero presidente también encabezó la firma de convenios entre el Instituto Nacional Electoral, el Colegio Nacional del Notariado Mexicano y el Colegio de Notarios de la Ciudad de México, con el objetivo de facilitar la prestación de los servicios notariales de fe pública en actos vinculados con el desarrollo de los comicios, antes, durante y después de los comicios.
Córdova Vianello afirmó que uno de los factores que contribuyen a robustecer la credibilidad de las elecciones es la colaboración con otras instituciones que comparten con la autoridad electoral la convicción y compromiso con la legalidad y la imparcialidad, como lo son, argumentó, los colegios de notarios de México.
