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Pese a que se intensificaron las reuniones a nivel ministerial para la renegociación del TLCAN, falta flexibilidad para llegar a un acuerdo, dijo el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo. No obstante, comentó que los tiempos políticos estadounidenses implican llegar a un acuerdo en la primera quincena de este mes.
En conferencia de prensa, acompañado por Eduardo Sánchez, vocero de la Presidencia, dijo que en la semana se reunirá con representantes de grandes empresas automotrices para entender la realidad del sector y, a partir de ahí, conformar un planteamiento en materia de reglas de origen para la industria, el cual será presentado en la negociación el próximo 7 de mayo.
Agregó que la propuesta estadounidense de reglas de origen es tener 40% de contenido nacional ligado a salarios de 16 dólares por hora y a trabajos relacionados con investigación, desarrollo, comercialización y mercadotecnia. Sólo los salarios equivaldrían a 15% y 25% a manufactura para conformar 40%.
Guajardo explicó que “sería muy saludable para América del Norte encontrar una solución lo más pronto posible”, pero aún siguen planteamientos inaceptables para México como la muerte súbita del acuerdo, tema delicado que genera incertidumbre y erosionaría las ventajas del TLCAN.
Sin embargo, dijo que los tiempos presionan más a EU que a México, porque tendría que votarse la aprobación del tratado antes de la primera mitad de mayo y se quiere que lo haga el actual Congreso estadounidense.
“Es clarísimo que, dadas las diferentes circunstancias que tienen que ver más con el calendario de corto plazo de Washington, aunque también tenemos calendario en México, pero lo más importante es quiénes aprobarían en el Congreso, el acuerdo tendría que estar listo para mediados de mayo”, consideró.
Para el funcionario, a pesar de los tiempos, “la calidad del acuerdo es fundamental antes que las fechas”.
No obstante, consideró que hace falta creatividad y flexibilidad para lograr el objetivo. “Efectivamente no hemos tenido todos la flexibilidad necesaria, si no ya estuviéramos en un acuerdo. El hecho de que no lo estemos es que en la mesa no están las flexibilidades necesarias. Pero para llegar a un acuerdo se requiere creatividad y flexibilidad”, afirmó.
Guajardo descartó que la renegociación del TLCAN esté ligada al tema acerero, a pesar de que el presidente estadounidense, Donald Trump, afirmó que la decisión de imponer aranceles al acero y al aluminio mexicano y canadiense son parte de la negociación, y que mientras esté vigente la modernización, habrá exención para sus contrapartes.
Este lunes el gobierno estadounidense anunció que estarán exentos por 30 días más de aranceles, los productos acereros y de aluminio de México y Canadá, entre otros países, a los que pretende imponerles impuestos por considerar que es un asunto de seguridad nacional.
Guajardo también señaló que el Tratado de Libre Comercio entre la Unión Europea y México (TLCUEM) muestra equilibrios entre los intereses de ambas partes, ya que se protegieron los lácteos nacionales, mientras que los europeos hicieron lo propio con los cárnicos.